Pese a que parte de la fabricación de las furgonetas eléctricas se hará en la factoría del grupo en Reino Unido y a que la firma prevé para ya la desaparición de los modelos con motores a combustión en las versiones no profesionales, las proveedoras de Stellantis Vigo se preparan para un fuerte aumento de cadencia. Fuentes del sector confirman que la dirección de Balaídos está avisando a las empresas para que se preparen de cara a un alza de hasta el 30% en el plazo de menos de un año de la mano de dos hitos: por un lado, el despegue de la fabricación de las K9 tras dejar atrás, poco a poco, la pesadilla de la crisis de los microchips; por otro, el esperado lanzamiento de la quinta silueta, la Fiat Doblò, cuyo anuncio oficial se espera para este trimestre.
Stellantis Vigo vive un momento de crecimiento gracias a las buenas ventas de los modelos que salen de sus líneas de montaje y a las previsiones que mantienen para 2022. Si el aprovisionamiento de la materia prima y de los componentes sigue el curso previsto, la dirección cuenta con superar el récord de producción logrado en 2007 (547.000 vehículos) que frustraron tanto el estallido de la pandemia como la crisis de los chips. La reciente reactivación del cuarto turno en la línea de furgonetas (se recuperarán los 700 empleos temporales perdidos el pasado octubre) apunta ya en esa dirección.
La llegada de la Fiat podría coincidir con un “restyling” del resto de las furgonetas
Esta expansión beneficiará, como es habitual, a las empresas del sector de la automoción. De hecho, las proveedoras de Vigo y su área cuentan ya con dos fechas clave para un aumento de la cadencia. Serían de igual intensidad, de entre un 13 y un 15 por ciento, y se dividen entre el próximo junio y enero de 2023, momento en el que se espera una total integración de la nueva silueta y, casi con toda seguridad, un remozado (restyling) de las unidades ahora en fabricación.
La nueva Doblò reforzará la producción del Sistema 2, cuna de las furgonetas superventas a las que se incorporará la Fiat. El modelo de la enseña italiana pasará a ser una K9 más, tal y como explicó en una entrevista para FARO el responsable de Negocio de Vehículos Industriales Ligeros de Stellantis para España y Portugal, Alberto de Aza, que adelantó también un anuncio oficial de la asignación antes de abril. De hecho, Balaídos ya está trabajando en ellas, lo que motivó la entrada de la fábrica en una fase de confidencialidad para que no se filtren detalles o imágenes.
La previsión trasladada por Stellantis Vigo genera también tranquilidad entre las proveedoras. Si bien algunas mostraron su preocupación por la pérdida de carga de trabajo en la versión eléctrica de las furgonetas en favor de Ellesmere Port (donde el grupo invertirá unos 120 millones de euros), la llegada de la Doblò y el impulso al resto de la gama generará mayores pedidos.
