La advertencia de la Conferencia de Rectores (CRUE) de que la reforma laboral puede causar "impactos negativos" en el ámbito de la investigación al suprimir el contrato temporal por obra o servicio sigue despertando el rechazo de diferentes colectivos. A la indignación de UGT y CCOO, que responden que hay que aprovechar la nueva ley para extender los contratos indefinidos en una actividad muy precarizada, se le suman ahora los principales interesados: los propios investigadores.

La Federación de Jóvenes Investigadoras (FJI) ha elaborado un comunicado sobre "la reforma laboral y su aplicación al sector de la ciencia y dadas las distintas reacciones que se han expresado públicamente en los últimos días" en el que, en una alusión clara a la posición de la CRUE, rechazan "cualquier iniciativa que tenga como objetivo decretar una suerte de excepcionalidad del sector científico para justificar el mantenimiento de la precariedad actual".

Reivindican en cambio que se les aplique la nueva normativa: "Entendemos que la reforma laboral, con la supresión de los contratos por Obra o Servicio entre otros aspectos, tiene por objetivo reducir la temporalidad y la precariedad y por tanto pensamos que es positiva y que se debe aplicar a nuestro sector del mismo modo que se debe aplicar al conjunto de los/las trabajadores/as".

Adaptada a la ciencia

Ante el argumento de los rectores de que el contrato de obra o servicio "es de frecuente utilización en las áreas de la investigación" y que sin él -o una alternativa similar- se desencadenará una situación que "puede hacer que se pare el sistema de ciencia y tecnología", la FJI plantea una adaptación de la nueva normativa a un entorno científico "acostumbrado al uso y al abuso de los contratos por Obra o Servicio encadenados y ligados a proyectos de investigación, cubriendo a menudo necesidades estructurales de las instituciones contratantes por medio de contratos temporales". En este sentido, proponen usar más las figuras previstas en la Ley de Ciencia, como los contratos predoctorales y posdoctorales, a los que se añadirá en los próximos meses una nueva modalidad de contrato indefinido "previsto en el anteproyecto de modificación de dicha Ley de Ciencia y cuya redacción parece claramente dirigida a dar encaje a la reforma laboral en el sector de la investigación científica": el contrato de actividades científico-técnicas.

La FJI termina su comunicado reiterando "nuestra posición en favor de que se aplique plenamente la reforma laboral en Ciencia y nuestro rechazo a cualquier modificación que resultara en una consolidación más de la precariedad actual".