El gigante de la educación Inspired Education, conocido en España por ser el dueño de King’s College y San Patricio, prepara su venta en la que podría convertirse en la operación del año en el sector de la educación. Según han indicado diferentes fuentes financieras a EL PERIÓDICO DE ESPAÑA, diario perteneciente al mismo grupo editorial que este medio, los dueños del grupo han contratado a un asesor para dar entrada en el accionariado a un nuevo inversor en este grupo de educación global, que cuenta con una red de 70 centros repartidos en 20 países que proporciona sus servicios a más de 55.000 estudiantes. Las mismas fuentes indican que el proceso, que todavía se encuentra en una fase muy inicial, puede estar valorado en una horquilla de precios de entre 1.500 y 2.000 millones de euros.

En España, el grupo Inspired Education es propietario de los centros San Patricio y King’s College desde 2019, año que se produjo un auténtico boom del capital riesgo en la industria educativa nacional. En España también son dueños de Mirabal y Kensington School (ambos ubicados a las afueras de Madrid), así como de Sotogrande International School (Cádiz). El mismo año que el grupo desembarcó en el país se cerraron otras dos importantes transacciones en el sector: la venta de Laureates International School (los dueños de la Universidad Europea) a Permira por 700 millones y la de la Universidad Alfonso X El Sabio al fondo británico CVC, conocido fuera del mundo financiero por su reciente inversión en LaLiga, por 1.000 millones.

Posteriormente, en España se han producido otras conocidas operaciones en otros nichos del mercado educativo, como el negocio de la Formación Profesional (FP) en la que han aterrizado fondos como KKR con MasterD o Investindustrial con Campus Training; la educación centrada en el mundo digital, como la apuesta del fondo español Magnum con su conglomerado Digital Talent creado a partir de Isdi (marketing digital) y reforzado con otros centros como el Instituto Superior de Derecho y Economía (Isde) o Eserp Business & Law; o bien las academias de idiomas, como Corpfin con Kids & Us.

¿Por qué invierten?

El interés del capital riesgo en este sector que se ha acelerado ante la llegada del coronavirus y el impacto en ciertos ámbitos de la educación, especialmente en aquellos centros que contaban con menos presupuesto para poder hacer frente a la realidad digital y confinada exigida por la pandemia. En este sentido, el negocio de la educación privada en España va ganando adeptos año tras años al calor de familias que no dudan en gastar importantes cantidades de dinero en la formación de sus hijos. Una tendencia que, según los expertos, no va a reducirse, sino al contrario, mostrando la resilencia de este nicho de inversión en los vaivenes económicos.

Las universidades privadas y escuelas de negocio ingresaron 2.575 millones de euros en 2019 (el último ejercicio disponible), lo que supone un incremento del 5% respecto a la facturación del ejercicio anterior, según los datos del Observatorio Sectorial de DBK Informa. A esta cantidad se sumarían los 12.625 millones ingresados en el segmento de los colegios, lo que se traduce en un pastel de más de 15.000 millones de euros anuales para el negocio de la educación privada en España, en un momento en el que el número de alumnos que reciben no para de incrementarse.

El negocio de la educación privada en España mueve más de 15.000 millones de euros

Por otro lado, para los inversores este negocio ofrece importantes oportunidades de consolidación, pues la industria de la educación en España todavía está muy fragmentada, tanto a nivel de colegios como de academias o centros de formación profesional. De esta forma, el capital riesgo ha encontrado un nicho en el que crear grandes plataformas que posteriormente venderán con importantes retornos. Sin embargo, para llegar a estas plusvalías, los fondos también dedican grandes cantidades de dinero a mejorar la calidad de la enseñanza, poniendo el foco especialmente en la digitalización de las capacidades que ofrecen y en la internacionalización de estos centros. Un ejemplo de esto fue la de los colegios NACE y Magnum, fondo que apoyó al equipo directivo en la creación de un líder en educación a nivel europeo, que posteriormente vendió al estadounidense Providence obteniendo grandes plusvalías.

Al hilo de esto, esta gran apuesta por el negocio educativo por parte del capital riesgo no ocurre únicamente en España, pues es un sector que los fondos llevan años mirando a nivel mundial. Pesos pesados del sector como los anteriormente citados, Cinven o Carlyle han realizado conocidas operaciones fuera de las fronteras españolas. Es más, desde hace años hay gestoras de capital riesgo que cuentan con fondos específicos para invertir en este nicho de negocio, como es el caso de Sterling Partners. De hecho, Inspired Education lleva años contando con el respaldo de conocidos fondos como TA Associates (que ha participado en España en compañías como eDreams o Kiwoko), Warburg Pincus (dueño de Self Bank) y Oakley Capital (que ha sido accionista de Idealista o la firma de sotware Ekon).