Cepsa obtuvo un beneficio neto en los nueve primeros meses según las normas de contabilidad internacional (NIIF) de 498 millones de euros, gracias, fundamentalmente, al aumento de los precios del crudo, de la producción y de los márgenes, frente a las pérdidas de 810 millones de euros registradas en el mismo periodo de 2020, informó la compañía. Los resultados de la firma propiedad de Mubadala Investment y participada por The Carlyle Group se vieron afectados en el pasado ejercicio por el deterioro de activos, el entorno de precios bajos y la reducción de la demanda.

El beneficio neto ajustado (Clean CCS) durante los nueve primeros meses del año fue de 295 millones de euros, lo que supone multiplicar por más de 9,5 los 31 millones de euros registrados en el mismo periodo del año anterior.

El resultado bruto de explotación (Ebitda) se situó en 1.346 millones de euros hasta septiembre, lo que supone un aumento del 48% respecto a los 910 millones del mismo periodo de 2020, impulsado por la subida de los precios del petróleo y el aumento de la producción de crudo, la mejora de los márgenes y el aumento de la producción de refino, y el consistente desempeño tanto del área Comercial como de Química. Cepsa ha seguido optimizando en este periodo las inversiones, hasta los 310 millones de euros, frente a los 464 millones de enero a septiembre de 2020.

El flujo de caja libre antes del capital circulante hasta septiembre experimentó una significativa mejora, pasando de 55 millones de euros en 2020 a 918 millones de euros en 2021, principalmente por la mejora de los resultados.

Cepsa mantuvo una fuerte posición de liquidez de más de 4.100 millones de euros. La compañía tiene un perfil de vencimiento a largo plazo de 4 años, con mínimos vencimientos de deuda hasta 2024, y una deuda neta a 30 de septiembre de 2.348 millones de euros, lo que supone un descenso de 475 millones de euros respecto a finales de 2020, a pesar del dividendo a cuenta de 211 millones de euros abonado durante el tercer trimestre de 2021.

Cepsa sigue avanzando en su programa plurianual de eficiencia, un plan a tres años cuyo objetivo es mejorar el margen bruto y capturar ahorros sostenibles en costes operativos. Hasta septiembre de 2021 ya se han capturado 295 millones de euros de mejora de Ebitda, que se suman a los 73 millones de 2020 como parte del Plan de Contingencia.

En Exploración y Producción, Cepsa registró una mejora significativa de sus resultados, alcanzando un Ebitda de 615 millones de euros en los nueve primeros meses del año, un 83% más que en el mismo periodo de 2020. Este incremento interanual se ha debido principalmente a la subida de los precios del crudo (+66%), a la reducción de los costes de producción -con un descenso interanual del 11% en los gastos operativos-, y a un ligero aumento de la producción (+1%).

Los precios del crudo en el tercer trimestre siguieron aumentando, con un precio medio del Brent de 73,5 dólares por barril, consolidando el repunte experimentado desde el primer trimestre del año.

En Refino, a pesar de que los márgenes se vieron afectados por el incremento de los precios de la energía, el aumento de la producción en las refinerías y la aplicación satisfactoria de medidas de eficiencia de costes se tradujeron en un Ebitda de 117 millones de euros en el periodo de enero a septiembre, frente a los 34 millones de euros registrados en los mismos meses de 2020 (+240%).

El Ebitda del área comercial siguió mejorando, con un aumento del 12% respecto a septiembre de 2020, hasta los 345 millones de euros, gracias a un buen comportamiento de los márgenes y a un riguroso enfoque de eficiencia de costes, a pesar de que los volúmenes de ventas se encuentran un 15% por debajo de los niveles anteriores a la pandemia.

La química, en niveles prepandemia

El negocio de Química continuó ofreciendo unos resultados muy sólidos, con un Ebitda de 355 millones de euros en los nueve primeros meses del año, que ha supuesto un aumento del 39% frente a septiembre de 2020 (y del 91% frente al mismo periodo de 2019), impulsado principalmente por la repercusión positiva de una estrategia comercial mejorada, unida a una tendencia sostenida de rendimiento operativo récord desde 2019.

Durante el tercer trimestre, el negocio de Química de Cepsa logró un hito importante con la producción de los primeros volúmenes de LAB, materia prima para producir detergentes biodegradables, a partir de aceites vegetales.

Cambio de CEO

El pasado 15 de octubre, Cepsa anunció el nombramiento de Maarten Wetselaar como CEO de la compañía a partir del 1 de enero de 2022. El actual CEO, Philippe Boisseau, permanecerá en la empresa tras el traspaso como asesor del consejero delegado y del consejo.

Según Boisseau, la compañía ha logrado un buen desempeño hasta la fecha y las perspectivas son buenas para lo que queda de 2021, a pesar de la reciente volatilidad de los mercados energéticos mundiales y del aumento de los precios de la energía en Europa.

A su juicio, los "sólidos" resultados de 2021 se deben a las iniciativas puestas en marcha desde el inicio de la crisis del Covid-19 y al continuo foco en la eficiencia, tanto en costes como en inversiones. "Estos resultados proporcionan una base sólida sobre la que construir nuestro plan de transición energética", ha destacado.

A este respecto, ha destacado que en 2021 la compañía ha logrado avances significativos en la construcción de una nueva organización y en la preparación y reorientación del negocio para aprovechar al máximo las oportunidades que ofrece la transición energética. "Además, hemos puesto en marcha un ambicioso plan de optimización, que ya está proporcionando resultados muy buenos, con aproximadamente 300 millones de euros de impacto positivo en el Ebitda logrados en los primeros nueve meses del año", ha subrayado.