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La falta de formación amenaza con un cuello de botella para digitalizar las pymes gallegas

Empresarios, expertos y administraciones aseguran que el proceso debe empezar en la cúpula de las empresas y fijar objetivos claros

Jorge Cebreiros, Juan Vieites, Francisco Conde y Nuria Rodríguez, ayer. | // PABLO HERNÁNDEZ GAMARRA

Los análisis sobre el uso de las nuevas tecnologías y la I+D en el sector privado ofrecen a menudo muy pocos detalles de las empresas de menos de 10 trabajadores porque su inversión suele ser anecdótica. Si tienen ordenador o no, conexión a internet, página web y algunas otras cuestiones básicas. Pero también eso cambió en 2020. En solo un año, según los últimos datos de la Axencia para a Modernización Tecnolóxica de Galicia (Amtega), el número de micropymes en la comunidad con una línea superior a los 100 megas se disparó un 93% y casi un 79% las que disponen de venta online. ¿Sorpresa? No, una pandemia que afloró el déficit de la digitalización del tejido productivo y, a la vez, obligó a un acelerón sin precedentes para no ser una víctima más de la crisis del coronavirus.

“El futuro será digital o no será”, advertía ayer Jorge Cebreiros, presidente de la Confederación de Empresarios de Pontevedra (CEP), en unas jornadas organizadas por la entidad para medir este fenómeno como motor del crecimiento económico y la competitividad. Todos los expertos insisten en esa misma idea. En un momento de tantas interferencias en la gestión, la transformación de la forma de producir y de la organización interna en las compañías es un seguro de supervivencia, pero solo si realmente hay vocación de hacerlo y se forma a las plantillas.

Todos en el centro

“La adaptación de la organización y el modelo de negocio por culpa de la pandemia dejó en general buenos resultados, pero hay que tener cierto cuidado con la falsa imagen de haber logrado el objetivo. Es un parche. Se necesita una estrategia a largo plazo”, advirtió Santiago Lago, catedrático de Economía Aplicada de la Universidade de Vigo. La digitalización supone una gran oportunidad para Galicia porque “difumina las barreras de la localización geográfica” y el hándicap de la dispersión. La competencia por captar talento es “feroz” y cuesta dinero, pero “como en los mercados de fútbol, se puede optar por la cantera”. El también director del Foro Económico de Galicia fue en primero en recalcar en que la metamorfosis debe empezar por la cúspide de la empresa, “por el consejo de administración”.

Manuel Ángel Alonso, de Telefónica, y Lara Graña, jefa de Economía de Faro de Vigo. // Pablo Hernández Gamarra

La digitalización “no es una meta en sí misma”, aseguró Mar Pereira, directora de la Amtega, sino “el camino para sacar provecho a la tecnología y posicionarse en nuevos productos y mercados”. “Por eso –añadió– antes una pyme debe hacerse muchas preguntas que no son de tecnología”. “Hay que tener claro para qué se hace, si de verdad es tan positivo como puede serlo para otros”, incidió igualmente Leonor Parcero, presidenta de la Asociación Galega de Comunicación de Cultura Científica e Tecnolóxica. “Uno de los elementos que más retrasa el proceso es la falta de profesionales y la ausencia de mujeres”, explicó Manuel Ángel Alonso, director territorial Norte de Telefónica, a pesar “de que las oportunidades laborales son enormes, abundan proyectos y la remuneración es más alta”.

Además de una plataforma de formación abierta, los 15.000 empleados de Banco Sabadell tienen acceso a “un currículum ad hoc” para prepararles en la digitalización diseñado “pensando primero en que son ciudadanos”, contó el director de diseño y servicios digitales de la entidad. La responsable de Formación e Colocación de la Xunta, Zeltia Lado, avanzó los cambios que se avecinan en el sistema público de Emprego con una agenda gallega de capacidades, un estudio del impacto de las nuevas tecnologías en el mercado laboral y una aplicación “para conocer en tiempo real” las particularidades de la oferta.

"Precisión quirúrgica"

“No llega ya con identificar las necesidades y recabar datos”, opina, sin embargo, Ismael Rego, coordinador de formación del SEPE en Pontevedra. “La formación tiene que ir a una precisión quirúrgica –comparó– en cada ocupación”. ¿Y cómo debe abordarse desde las administraciones? “Para hacer un proceso racional, la formación de ocupados debe descansar en la negociación colectiva –pidió Manuel San Juan, director de asistencia técnica empresarial en Fundae–. Se necesita un nuevo marco jurídico-administrativo y se necesita ya”.

La aceleradora de la digitalización para la función logística CBA se pone como ejemplo de la importancia, señaló Isabel Álvarez, “del 3x1”: unir empresas tractoras que ponen retos, emprendedores que buscan soluciones y el apoyo de la administración. Tanto Pablo Parrado, de Siemens, como Agustín Juncal, de Rockwell Automation, consideran fundamental que las empresas tengan “un plan estratégico claro y definido” y conozcan bien sus debilidades, “lo que le quita el sueño por las noches, que es la respuesta que puede dar la tecnología”. Y eso no suele suceder. “Nos cuesta mucho esfuerzo trasladar el mensaje de que la digitalización nace desde la gerencia y evitar el choque generacional, eso de que siempre lo hemos hecho así”, alertó Alberto Ares, de CTI Consultores.

Parte de los asistentes a la jornada de digitalización de la CEP. // Pablo Hernández Gamarra

Los empresarios aprovecharon para reclamar “una simplificación de trámites” para “disponer de más tiempo de dedicación” al día a día del negocio. “Es un reto frente al que tenemos que empujar entre todos”, esgrimió Juan Vieites, líder de la Confederación de Empresarios de Galicia (CEG). El colectivo admite que, al margen de las ayudas públicas, “el pulso de la innovación –apuntó Cebreiros– debe salir de las empresas”. “Debemos transformar la incertidumbre en estrategia”, expuso David Regades, delegado de Zona Franca. “Estamos ante un cambio de era que modifica el tejido productivo con la innovación y el respeto al medio ambiente en el centro de todo”, apeló Francisco Conde, vicepresidente segundo y conselleiro de Economía.

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