El administrador judicial de Alu Ibérica (antigua Alcoa), el abogado y economista Ramón Juega, ha transmitido hace unos minutos vía telefónica al presidente del comité de empresa, José Manuel Gómez de la Uz, que dada la cantidad de embargos, deudas y compromisos económicos pendientes de atender que están siendo descubiertos, y teniendo en cuenta que esta situación pone en "profundo riesgo" la continuidad de la planta se ve obligado a solicitar un preconcurso de acreedores para minimizar el impacto y poder mantener la fabrica a flote.

Por parte sindical, la medida ha sido interpretada como "prudente" y enfocada a tratar de salvar la factoría, lastrada gravemente por la gestión que llevaron a cabo los compradores sucesivos de la misma después de que la multinacional Alcoa la vendiese en 2019.

Al margen de la solicitud del preconcurso de acreedores, el administrador judicial también está preparando la documentación para tramitar, previa negociación con la plantilla, un expediente temporal de regulación de empleo de todo el personal, cuyas percepciones salariales están en peligro dada la falta de ingresos de la empresa.