El Corte Inglés ha elevado su cifra de ventas un 50,2% en su primer trimestre fiscal (entre marzo y mayo) hasta los 2.511 millones, después de un duro 2020 en el que la cadena permaneció cerrada durante ese periodo que coincidió con el confinamiento, a excepción del área de Alimentación. El grupo se acerca hacia las cifras precrisis, pero aún se mantiene alejado por la división de viajes y la falta de turismo. En 2019 la compañía facturó en los primeros tres meses de su ejercicio 3.300 millones, según publicó entonces Cinco Días.

Con todo, para el grupo de grandes almacenes, este inicio del ejercicio 2021 da muestra de una “fuerte recuperación tras el año de COVID” al situarle en “niveles cercanos” a los conseguidos en 2019, “excluyendo la división de viajes y el impacto que el turismo tiene en el retail”. En cuanto al margen bruto, la cadena ha registrado un incremento del 69,2% sobre el mismo periodo de 2020, situándose en 801 millones de euros, mientras que el Ebitda alcanza los 81 millones, lo que supone un aumento de 276 millones respecto al mismo periodo del anterior ejercicio.

Las cifras difundidas ayer por El Corte Inglés no incluyen el resultado neto del grupo. Por líneas de actividad, el corazón de su negocio, el retail, refleja ya unas cifras cercanas a 2019, según la firma, a pesar del impacto que supone la falta de turismo y las restricciones. En el primer trimestre, la cifra de negocios mejora un 47,8% respecto al mismo periodo de 2020.

Dentro de los negocios de no retail, Seguros “mantiene unas ventas estables con 54 millones de euros en el primer trimestre”. Durante el confinamiento, el grupo tuvo que reforzar su canal online para poder competir con todas las tiendas cerradas. Así, las ventas a través de Internet han crecido un 119% respecto al mismo trimestre del ejercicio 2019.