Aunque el Gobierno no hubiera adelantado la buenísima tendencia con la evolución de las afiliaciones y de los afectados por Expedientes de Regulación Temporal de Empleo (ERTE), el día a día en la calle permitía intuir un antes y un después en la crisis del coronavirus en junio. El fin del estado de alarma en mayo y el acelerón de la vacunación fueron un acicate para la recuperación del mercado laboral, que se consolidó el mes pasado con algo más de 233.000 altas en la Seguridad Social y una caída del paro de casi 167.000 personas.
“Nunca en la historia de la democracia española nos hemos encontrado con una reducción de semejante intensidad”, valoró ayer Yolanda Díaz, vicepresidenta tercera y ministra de Trabajo, como “un logro colectivo del país, de los empresarios, los sindicatos y la sociedad en su conjunto” y de “políticas de gestión de crisis radicalmente diferentes”. El buen ritmo de recuperación “es absolutamente consistente”, según el ministro de Inclusión y Seguridad Social, José Luis Escrivá, y se ve en todos los sectores, junto con una caída de casi 100.000 afectados por ERTE. Galicia tuvo también su propio récord. De media se crearon unos 11.200 empleos, una cifra nunca vista en un mes de junio; y el número de desempleados disminuyó en 7.600.
Ahora sí, la comunidad recupera los niveles de ocupación prepandemia. Se superaron las 1,021 millones de afiliaciones, una cifra que no se alcanzaba desde diciembre de 2019. El incremento mensual fue del 1,1% por el tirón del régimen general (1,3%), mientras que el alza entre los autónomos se situó en el 0,3% (567 nuevos) y del 0,9% (187) en el régimen especial del mar. En comparación con junio del pasado ejercicio, cuando todavía se daban los primeros pasos de la desescalada posterior a la primera ola del COVID-19, el empleo en Galicia aumentó un 3,6%, en 35.000 puestos. La subida mensual en el conjunto del Estado creció un 1,2% y un 4,7% el acumulado anual.
A cierre de junio quedaban en Galicia 18.779 trabajadores en algún tipo de ERTE, uno de cada tres con reducción de jornada y el resto en suspensión completa. Los afectados se redujeron en 4.000 a lo largo del mes pasado y en todo el país descendieron a 448.000, la menor cifra desde que empezó la crisis del coronavirus.
La mejora es más que evidente en el paro. La comunidad tenía el mes pasado a 157.700 personas a la espera de una oportunidad laboral después de una merma del 4,6%, ligeramente por encima del recorte estatal (4,4%). El desempleo bajó un 5,4% en los servicios; un 4,5% en agricultura y pesca; y alrededor del 3,7% tanto en industria como en construcción. Solo rebotó un 0,7% en el colectivo sin ocupación anterior.
Baleares, Asturias y Cataluña lideran la caída en junio: 16,7%, 9,5% y 7,5%, respectivamente. Aunque Galicia, como destaca la Consellería de Emprego e Igualdade, es la única autonomía que lleva seis meses consecutivos a la baja, con “cierta ventaja”, según la directora xeral de Formación y Colocación, Zeltia Lado, hacia la recuperación. El paro retrocedió en cerca de 32.000 personas en la primera mitad del año en la región, coincidiendo también con el fin de la renovación automática de la demanda. De hecho, las afiliaciones en ese mismo periodo aumentaron bastante menos, en 19.560.
Los contratos se acercaron a los 86.000, lo que supone un incremento mensual del 29%. Los sectores con mejor comportamiento fueron la hostelería, el comercio y los servicios personales, con 27.600 contratos, un 61% más que en mayo. Nueve de cada diez son puestos temporales, que aumentan el doble (30,5%) que los indefinidos (16%). “Un panorama que contrasta con el triunfalismo del Ministerio de Trabajo”, critica la CIG, por “la precarización de las condiciones laborales”. CCOO apela a la Xunta a cambiar sus políticas de empleo. “Tiene que dejar de hacer teatro y ponerse de una vez por todas manos a la obra para salir en buena posición de esta crisis”, asegura Maica Bouza, responsable de Emprego del sindicato. UGT rechaza hablar de mejoras porque “persiste la rotación en la contratación, la temporalidad y el paro de larga duración”.
La construcción lidera la caída del paro en la comarca de Vigo
La provincia de Pontevedra lidera la caída del paro en Galicia durante el mes pasado. Son 3.300 personas menos, una caída del 5,2%. El descenso en Lugo fue del 4,9% (803); del 4,4% en A Coruña (2.931); y del 2,6% en Ourense (2,6%). El recorte alcanzó el 2,8% en la comarca de Vigo, donde hay 30.000 desempleados al final de junio, 853 menos que en mayo. A diferencia del resto de la comunidad, el sector con mejor evolución fue la construcción, con una merma del 5,3%. En el sector primario el paro bajó un 4,6% en la comarca viguesa; un 3% en la industria; un 2,9% en el sector servicios; y subió un 1% en el colectivo sin empleo anterior. Entre los concellos destacan dos de los principales destinos turísticos de la zona, Nigrán y Baiona, con reducciones del 6,1% y el 5,1%, respectivamente. El paro bajó un 4,7% en Soutomaior; el 4,5% en Pazos de Borbén; el 4,4% en Fornelos de Montes; y el 4% en O Porriño. En la ciudad de Vigo disminuyó un 2,5%. Los menores recortes están en Salceda de Caselas (0,8%) y Redondela (1,9%).
