La central nuclear Ascó I (Tarragona) ha registrado esta pasada noche una parada automática del reactor por el cierre "imprevisto" de una válvula de control de agua, sin que esta situación haya comportado peligro para los trabajadores, la población o el medioambiente, en un suceso clasificado como de "nivel 0".

Así lo ha informado hoy en un comunicado el Consejo de Seguridad Nuclear (CSN), en el que se explica que la parada automática del reactor "ha sido generada por el cierre imprevisto de una válvula de control de agua de alimentación principal a uno de los generadores de vapor, debido al fallo de la membrana del actuador de la válvula".

"El cierre ha producido la parada automática de los dos turbobombas de agua de alimentación principal que, a su vez, ha generado la parada automática de la turbina y, al estar la potencia del reactor por encima de 34 %, ha desembocado en la parada automática de éste", se indica en la nota.

El Consejo de Seguridad Nuclear ha asegurado que los sistemas de seguridad de la planta han funcionado y que la nuclear se encuentra ahora en modo 3 (espera caliente), es decir, con el reactor parado y la temperatura media del refrigerante en valores nominales.

"El suceso no ha tenido impacto en los trabajadores, el público ni el medioambiente", según precisa el CSN, que ha clasificado este suceso en el nivel 0 en la Escala Internacional de Sucesos Nucleares y Radiológicos (INES).

Esta escala clasifica los sucesos nucleares en siete niveles, y cuando no revisten importancia desde el punto de vista de la seguridad se los denomina 'desviaciones' y se clasifican 'debajo de la escala/nivel 0', como ha sucedido en el caso de Ascó.