El consejo de administración de la Autoridad Portuaria de Vigo ha acordado la extinción de la concesión que ocupaba Factorías Vulcano, y que formó parte de la operación de venta de sus instalaciones a Grupo Argos. Por mayoría, este órgano ha recuperado así para el Puerto más de 25.000 metros cuadrados de espacio, con lámina de agua, que saldrán a concurso con un pliego de condiciones que está todavía en fase preliminar. Argos, que ha renombrado la atarazana como Astillero San Enrique, se queda sin salida al mar. El área portuaria incluye los espacios donde ahora se ubican los muelles, el carro de varada, grúas o varios almacenes de cubiertas móviles.
Fue la sentencia del Tribunal de Conflictos de Jurisdicción la que despejó este camino, hace escasas cuatro semanas. La Sala, presidida por Carlos Lesmes, determinó que Vulcano había perdido el derecho de usufructo sobre esos terrenos el mismo día en que pidió su liquidación, en julio de 2019. Y, por tanto, la concesión no debió formar parte de la operación de compra de la instalaciones, por las que Argos abonó 7,85 millones de euros. No podrá solicitar ninguna indemnización en tanto el acuerdo estipula explícitamente que la compañía de José Alberto Barreras asume el riesgo de perder ese espacio.
