Los paneles solares son el pulmón del proyecto que ha diseñado el Consorcio de Zona Franca de Vigo, Atlantic Hydrogen Logistic Industrial Hub, de una planta para la generación de energía limpia en el polígono industrial de Balaídos mediante electrólisis. La factoría viguesa de GKN, una de las mayores proveedoras de la industria de automoción, analiza también la instalación de estos dispositivos. Realizará un estudio de las cubiertas de las dos naves principales de la empresa, con 34.000 metros cuadrados de superficie, para valorar las posibilidades de llevarlo a cabo.
Así lo analizaron esta semana el delegado del Consorcio y la directora de la planta, David Regades y Consuelo Domínguez, que también abordaron las opciones de que Zona Franca instale puntos de recarga para vehículos eléctricos en el polígono. En este sentido, Regades les trasladó los avances del proyecto de Zona Franca para la instalación de 76 puntos de recarga eléctrica, electrolineras, que se ubicarán en sus polígonos, parques empresariales y aparcamientos subterráneos, y que se prevé que estén en funcionamiento en 2022.
GKN Vigo cerró el pasado ejercicio con una facturación de 166,6 millones de euros. Aunque la estimación pasa por alcanzar los 195,1 millones en 2021, la crisis de los chips a nivel global amaga con rebajar algo esas previsiones. La planta de GKN en Balaídos es, tras la de Stellantis, la que emplea a un mayor número de personas en la ciudad, con 837 en plantilla.
