El cambio en la dirección del Banc Sabadell que debe aprobar hoy el consejo del banco afectarás también a la presidencia de las entidad. Josep Oliu dejará las funciones ejecutivas de la entidad una vez que se produzca el relevo del actual consejero delego, Jaume Guardiola, por César González-Bueno, que se incorporará a la entidad para llevar las riendas de la nueva etapas, tras el fallido intento de fusión con el BBVA. La decisión de Oliu se propone seguir las recomendaciones del Banco Central Europeo (BCE) en el sentido de que la presidencia de los banco no debe tener carácter ejecutivo, según han confirmado fuentes financieras.

El actual número dos de la entidad financiera de origen vallesano optará por la jubilación y, por tanto, por la salida del banco. Oliu, no obstante, se mantendrá en la entidad como presidente, pero no tendrá las funciones ejecutivas que tenía hasta ahora.

Los cambios forman parte del nuevo plan estratégico que el banco pretende seguir en en solitario a raíz de la ruptura con el BBVA. En ese momento, el Sabadell anunció se concentraba en su proceso de digitalización, en las pymes y clientes de valor y en una nueva estrategia internacional. González-Bueno ya responde al nuevo perfil requerido, en tanto que es uno de los pioneros de la banca digital en España. Su elección forma parte de un proceso que no se improvisa en dos semanas, apuntan fuentes consultadas, pero también es cierto que no es un desconocido para el Sabadell, puesto que en estos momentos es consejero de la filial británica TSB, que se encuentra en proceso de venta, También lo es David Vegara, que compagina esa función con la consejero ejecutivo del Sabadell. Vegara, asimismo, tendrá un papel más relevante en el nuevo banco comandado por González-Bueno.