Al desplome sin precedentes de la economía española durante la etapa del confinamiento por culpa del coronavirus le siguió también un histórico salto que supera las previsiones iniciales. El país abandona de momento la recesión tras un incremento del 16,7% Producto Interior Bruto (PIB) entre julio y septiembre, fruto del dinamismo habitual de los meses de verano, diezmado este año por las restricciones de aforo y el miedo a los contagios, y también del propio efecto rebote en comparación con la caída trimestral del 17,8% entre abril y junio. Por eso, la evolución anual, que permite dibujar mejor como están las cosas, pasa de un retroceso del 21,5% al 8,7%. Galicia ya presentaba mejores ratios en la actividad durante la primera ola de la pandemia –caída trimestral del 14,5% y del 17,9% en comparación con 2019– y la mayoría de magnitudes conocidas hasta ahora anticipan un más que probable mayor rebote.

El consumo, uno de los grandes revulsivos del PIB nacional, bajó en la comunidad dos puntos menos (18,1%) entre abril y junio, según el informe del Instituto Galego de Estatística (IGE). Y parece que así se mantuvo. La facturación del comercio minorista, por ejemplo, registró en septiembre la primera subida anual desde que empezó la crisis del Covid-19: un 3,1%. Llegó a caer un 25% en abril y un 13,2% en mayo. En lo que va de año, el recorte acumulado es del 4,6%, frente al 9,3% del conjunto del Estado, que cerró septiembre otra vez en números rojos del 3%. Hay que tener en cuenta que la variación está muy condicionada por el tirón de la alimentación, que lleva un alza este año del 5,8%, mientras que en el resto la bajada supera el 7% (14,4% el total del país).

En el caso de la producción industrial, la caída entre enero y agosto en Galicia fue del 13,2%, cuatro décimas más que la media española (12,8%). Pero en ese último mes con datos oficiales, el diferencial positivo de la comunidad respecto al resto es de más de un punto (-4,2% anual) gracias a la fuerte recuperación experimentada por la automoción (37,1%), que es la tercera rama que más pesa en el índice.

La situación es muy parecida en la exportación. Las ventas de las empresas gallegas a otros países en agosto ascendieron a 1.537 millones tras una reducción anual del 7,2%. El saldo de España cayó un 9,1%. La suma de los ocho meses deja una disminución en Galicia del 13,5% y del 14% en el país.