La Cámara gallega aprobó ayer por unanimidad una iniciativa del BNG –transaccionada con el PP– que insta a la Xunta a demandar al Gobierno central la intervención pública temporal de Alcoa San Cibrao de cara a su venta con el fin de mantener la actividad y el empleo. Esta propuesta es similar a la aprobada la semana pasada en el Congreso, en la que se piden “cuantas medidas sean necesarias” a “la mayor brevedad” para garantizar el futuro de la factoría, después de que Alcoa haya anunciado la ejecución del despido colectivo de 524 empleados de la planta de aluminio de San Cibrao.

Además, los tres grupos, PP, BNG y PSOE, aprobaron reclamar al Gobierno que ponga en marcha “de forma inmediata” un Estatuto del Consumidor Electrointensivo, con una mejora del borrador presentado para garantizar un precio estable. Al respecto, el diputado del BNG, Daniel Castro, avisó de que “esta intervención se tiene que hacer ya”. “No estamos en el tiempo añadido, ni en la prórroga, estamos ante el último penalti”, precisó. Todo ello, a la espera de que el Tribunal Superior de Xustiza de Galicia (TSXG) celebre el próximo 28 de octubre una vista para sustanciar la petición del comité de medidas cautelares para paralizar el expediente de regulación de empleo (ERE) decidido por la multinacional norteamericana.

También ayer, un grupo de trabajadores del turno B de electrolisis de la planta se quedó literalmente en “pelotas” para lanzar un mensaje de optimismo a sus compañeros y dejar claro que, a pesar de la difícil situación por la que atraviesa la fábrica mariñana, no están dispuestos a “tirar la toalla”. Once trabajadores de ese turno publicaron una fotografía en las redes sociales al estilo The Full Monty, la película inglesa estrenada en 1997 que popularizó el desnudo de los obreros de Sheffield contra la reconversión industrial.