Los trabajadores de Denso levantaron ayer la huelga indefinida convocada desde primera hora de la mañana tras la firma de un nuevo convenio pasadas las diez de la noche. Las conversaciones entre ambas partes se desenquistaron por la tarde tras dos días de negociación y con ello se evitó in extremis un en la producción de la factoría de Valadares que afectaría a la planta del Grupo PSA en Vigo en un momento delicado en el que la carga de trabajo está al máximo. En el nuevo texto se acuerda, entre otras cosas, una subida salarial del 3% para este año, del 1,5% para el siguiente y otro 1% para 2022.
La factoría de Balaídos estaba pendiente de la evolución de la situación en Denso, que amenazaba con un alto en la producción en todos los talleres para hoy tras el primer paro matutino en la empresa de Valadares, que comenzó a las seis de mañana.
Según publicó la CIG, la huelga fue secundada por "la totalidad del cuadro de personal" y "paralizó por completo la actividad en la compañía". El motivo, según explicaron, era "el incumplimiento" de la rotación de los puestos de trabajo y el atascamiento en las negociaciones del nuevo convenio.
Comité de empresa y compañía venían arrastrando un estancamiento en las negociaciones, aunque desde la firma se dio en todo momento por abiertas las conversaciones por el nuevo convenio. De hecho, la última propuesta tuvo lugar en la madrugada del martes para el miércoles, que fue rechazada por los trabajadores. Ayer por la tarde se llegó a un principio de acuerdo que fue finalmente aprobado en asamblea por la plantilla con 160 votos a favor, 20 en contra y uno en blanco.
Además de la subida salarial, y entre otras medidas, el convenio (2020-2022) recoge una paga de 400 euros cada uno de los tres años; dos días más de asuntos propios (haciendo un total de cuatro), y uno más en 2021, así como un aumento del seguro colectivo hasta los 50.000 euros.
