Los sindicatos CIG y CUT han dado traslado al Ministerio de Trabajo de sus denuncias sobre la "precariedad laboral" y la "sobrecarga" de trabajo de la plantilla en la fábrica de Grupo PSA en Vigo. Las centrales reclaman a las administraciones "que tomen cartas en el asunto".

Manuel Domínguez y Vítor Mariño, responsables de las secciones sindicales de CIG y CUT, respectivamente, han mantenido un encuentro en Madrid con la directora general de Trabajo, Verónica Martínez Barbero, a la que han informado de los "principales problemas" que, a su juicio, afectan a las líneas de producción en la factoría viguesa.

Los sindicatos han denunciado que las medidas de prevención implementadas debido a la pandemia de coronavirus, como desinfecciones o uso de mascarillas, deben ir acompañadas de un tiempo adicional para que los trabajadores puedan prepararse, ya que hasta ahora la adopción de esas prevenciones debe hacerse en los tiempos de parada.

Asimismo, han reclamado que las "cargas de trabajo abusivas" se adecúen a esas circunstancias, ya que es "incompatible" adoptar todas las medidas obligatorias de protección y, al mismo tiempo, mantener los ritmos de producción de antes de la pandemia.

En la misma línea, los sindicatos también han criticado que se obligue a los trabajadores a llegar cambiados de ropa desde casa y se restrinja el uso de vestuarios sin haber implantado "mejoras organizativas". "Deberíamos disponer de medios y tiempo para compatibilizar ambas necesidades, sin que ello penalice a los trabajadores", han apuntado.

Por otra parte, CUT y CIG también han trasladado a la Dirección General de Trabajo la necesidad de "regular" la contratación a tiempo parcial en la plantilla de PSA Vigo para que se garantice un mínimo de contratación a tiempo completo, al menos en los turnos de día (8 horas), con el fin de "reconducir la precariedad laboral actual".