El cuarto turno que empezará el próximo 10 de octubre en el sistema 1 de la planta de PSA-Vigo no será el único. El director del centro del grupo galo, Ignacio Bueno, anunció ayer un refuerzo en el taller de baterías inaugurado hace un año para que empiece este mismo fin de semana, lo que supone la contratación de 40 personas que elevarán la plantilla de este departamento hasta los 160 trabajadores. El motivo no es otro que el empuje de los modelos eléctricos, en especial el Peugeot e-2008 fabricado en la ciudad y los otros dos modelos para los que Vigo ejercer como centro neurálgico en baterías: el Opel e-Corsa que se produce en Zaragoza y el Citroën ë-C4 que se fabrica en Figueruelas (Madrid). Bueno hizo el anuncio durante una vista del vicepresidente segundo de la Xunta y conselleiro de Economía, Francisco Conde, y la conselleira de Emprego e Igualdade, María Jesús Lorenzana, y aprovechó la coyuntura para avanzar un aumento de la producción a final de año y para alinearse con las declaraciones del presidente de la firma, Carlos Tavares, sobre la transición energética en el sector: "El coche eléctrico sin ayuda estatal es de difícil alcance para ciertas clases sociales".

El taller de baterías de la factoría de Balaídos tiene una capacidad para producir 80.000 baterías al año y en la actualidad elabora 300 al día. Supuso una inversión de siete millones de euros y ocupa una superficie de 3.500 metros cuadrados repartido en tres áreas: montaje, Control de calidad y logística), así como un espacio de preparación de los módulos.

Tras un periodo de preparación iniciado en noviembre del año pasado, el taller se puso en marcha en enero con dos equipos de trabajo y menos de un año después estrenará este cuarto turno. La "fructífera" producción, como definió Bueno, llevó también a que se esté "preparando para aumentar su potencial" de cara a abastecer de baterías las futuras versiones eléctricas de los modelos Berlingo, Combo y Rifter/Partner, fabricadas también en Vigo en el marco del proyecto K9.

Los cuartos turnos en el sistema 2 y el taller de baterías se completarán con el del sistema 1 (que fabrica el 2008) en octubre, lo que supone 600 nuevos empleos. Será la primera vez que las dos líneas están al máximo de capacidad en los más de 60 años de historia de PSA en la ciudad y elevará la cifra total de empleos a los 7.500, unos 2.000 más que en el arranque de la nueva estrategia industrial del grupo.

Producción

A preguntas de los periodistas presentes en la planta, Ignacio Bueno explicó que la producción de este año "será sin duda superior a la de año pasado", cuando salieron de la factoría más de 400.000 vehículos. Lejos queda ya la intención de superar las 600.000 unidades, objetivo fijado a principios de año y truncado por la pandemia. En la actualidad se fabrican 2.300 vehículos diarios y otros 2.400 entre sábado y domingo.

El conselleiro de Economía, Francisco Conde, apuntó por su parte que las previsiones del sector gallego de la automoción el último trimestre parecen esperanzadoras y recordó el buen hacer de la planta olívica en materia de I+D+i, en el futuro del vehículo eléctrico en I+D+i y en cuando a infraestructuras. Conde también recordó el reciente acuerdo alcanzado con la firma por valor de 5 millones para potenciar la producción de la versión eléctrica de la K9.

En su primera visita a un factoría tras su nombramiento, la conselleira de Emprego e Igualdade, María Jesús Lorenzana, destacó el esfuerzo de PSA para retomar la producción en un tiempo récord y recordó que en los últimos 25 años el porcentaje de mujeres que trabajan en la fábrica pasó de representar un 2,75% de la plantilla a más del 23%.

Sobre las palabras de Tavares y la futura pérdida de empleo en el motor hasta 2030 por la transición energética, Bueno quiso aclarar que el presidente del grupo no se refería "a algo específico sobre PSA" o "que fuera a corto plazo". "La UE está presionando para incrementar el número de coches eléctricos y esa transición es más cara para los ciudadanos", indicó Bueno, "y se prevé que a nivel general haya una bajada de volúmenes de ventas de aquí al 2030".