La flota pesquera tiene ante sí unos meses complicados de aquí a final de año. Además de la reunión anual de NAFO o la próxima de la Comisión Internacional para la Conservación del Atún Atlántico (Iccat), está pendiente todavía de la propuesta de cupos de la Comisión Europea y, sobre todo, de la resolución del Brexit. De hecho, no está descartado que esta propuesta se retrase hasta que se vea con mayor claridad como será la salida de Reino Unido de la Unión Europea. El año pasado el planteamiento de Bruselas llegó la última semana de octubre, mes que se prevé clave para las conversaciones entre ambas partes.

Y según el negociador comunitario, Michel Barnier, todo apunta a que la salida será abrupta, ya que como reconoció ayer en una entrevista con la emisora France Inter porque Londres quiere "lo mejor de los dos mundos". "La negociación abarca el comercio, la pesca, la seguridad, el transporte, la energía y muchos otros temas. Sigo preocupado. Esta semana no empieza la última ronda. Habrá otras a finales de septiembre y en octubre. Es una negociación difícil", dijo.