Con todo lo bueno y lo mucho malo que implica también, la pandemia sopló al mercado laboral en agosto con aires frescos más propios del arranque de la primavera que del mes más fuerte del verano. De hecho, la media de cotizantes en Galicia fue prácticamente calcada a la de febrero: 1.012.794. ¿Qué quiere decir esto? Que la ocupación en la comunidad recupera los niveles previos a la crisis de la Covid-19, pero con una campaña estival tan, tan suave por la alargada sombra del virus que no da la vuelta ni de lejos a la sangría laboral de los meses de confinamiento estricto. La Seguridad Social sumó en Galicia 7.126 afilados el mes pasado, lo que supone un incremento del 0,71%. Casi 230 al día. El incremento de afiliación en el conjunto del país fue del 0,04%, con 6.822 altas.
No es nada habitual que agosto se cierre sin números rojos, arrastrado por el fin de la temporada veraniega. Pero la comparación con hace un año evidencia la falta de fuelle del turismo para la economía a causa del coronavirusEn Galicia hubo 24.100 cotizantes más en agosto de 2019 y 527.800 en toda España. Atendiendo al último día del mes, la comunidad tenía 1,005 millones de afiliados, 414 más que a 31 de julio.
El mapa de la evolución del empleo parte al país en dos. Lejos de un comportamiento parecido, cada autonomía ha seguido su propio camino. Sí hay semejanzas, muchas, con la fotografía que podría sacarse según su dependencia del turismo, cómo ha ido la afluencia de visitantes y, por supuesto, la incidencia de los rebrotes. Cantabria, por ejemplo, lidera el alza de cotizantes en agosto (1,55%) tras encabezar también el grado de ocupación en establecimientos hosteleros en el arranque veraniego. Asturias, el destino con menor caída de pernoctaciones, roza el 1% de incremento en la ocupación; y en Navarra creció un 0,8%. Todo lo contrario que Cataluña y Madrid, con recortes del 0,68% y el 0,24%, respectivamente. Aragón, la comunidad más afectada hasta hace muy poco por la segunda ola de la pandemia, sufrió una caída de afiliaciones en agosto del 0,45%; y Murcia del 0,62%. Canarias y Balares acabaron el mes con subidas igualmente (0,57% y 1,06%), pero sus desplomes con respecto a la campaña del pasado año son contundentes: 5,1% y 12,8%, según los datos publicados ayer por los ministerios de Trabajo y Seguridad Social.Expedientes de Regulación de Empleo
A 31 de agosto quedaban en Galicia 9.166 expedientes de regulación temporal de empleo (ERTE) por fuerza mayor en vigor con 22.150 trabajadores afectados. Son un 37% menos que al final de julio, cuando superaban los 35.000. El 85% de las personas que había en ERTE en la comunidad en abril, unos 128.000, volvió a la actividad. En toda España salieron del ajuste más de 2,4 millones de empleados, el 78,4%, y siguen en ERTE 663.656. Las tres autonomías con mayor porcentaje de trabajadores que dejaron el parón son los precisamente los que mejor pulmón laboral exhibieron en agosto: Navarra (89,7%) Cantabria (88,6%) y Asturias (86%).
Los ERTE por el resto de causas -económicas u organizativas, entre ellas- en Galicia se quedaron en 971 después de un descenso mensual del 13,7%. Dos de cada diez defectivos en las empresas que estaban en esta situación en julio recuperaron la normalidad y permanecen 4.902. El global de afectados por todos los ERTE vinculados a la Covid-19 en Galicia baja por tanto hasta los 27.052.
Galicia mejora la media nacional en el incremento de la ocupación y a la vez padece un ascenso del paro mayor que el conjunto de las comunidades. Subió en 1.640 personas, un 0,94% -en 29.780, el 0,79%, en el total del Estado- y el número de desempleados roza los 177.000. Vuelve a repetirse la heterogeneidad entre autonomías, aunque en este caso son pocas las que concluyeron agosto con el paro a la baja. Destacan Navarra, con un 2,7% menos; La Rioja (2,13%); y otra vez Cantabria (1,92%) y Asturias (0,43%), como recoge el balance del ministerio dirigido por la gallega Yolanda Díaz.
En la comunidad se firmaron 64.399 contratos el mes pasado, un 31% por debajo de agosto del ejercicio anterior. La caída es más dura, del 42%, en el caso de restauración, comercio y servicios personales. Un tercio de todos los formalizados fue para ocupaciones elementales.
El empleo de calidad es, según la secretaria xeral de Emprego, una de las prioridades de la Xuntaen el marco del diálogo social. Covadonga Toca subrayó la importancia de los cuatro meses que van al alza en las cotizaciones y la recuperación del empleo perdido en marzo y abril, "lo que demuestra la capacidad de reacción de nuestra comunidad". Los datos del paro son "preocupantes", advierte Maica Bouza, responsable de Emprego de CCOO, que insta a las administraciones a poner en marcha "medidas de estímulo a la actividad, mantenimiento de empleo y conciliación". A eso añade UGT el cambio de la reforma laboral "para primar el empleo indefinido y con derechos". La CIG recuerda la reducción de prestaciones a los que lleven más de seis meses en ERTE y acusa a la Xunta de incapacidad para "un proyecto industrial y productivo que redunde en el país".
