-Argos estima la creación de 70 empleos. En estos casos, ¿existe algún tipo de comisión de vigilancia, administrativa o judicial, que vele por el cumplimiento de los términos de su oferta?
-No. Una vez producida la venta de los bienes de la concursada, desaparece cualquier control judicial sobre lo que pase después. La función de los administradores concursales es enajenar todos los bienes y derechos de Factorías Vulcano y, con su producto, pagar a los acreedores de la concursada en el orden que establece la Ley Concursal.
-¿Existe algún tipo de blindaje que impida a cualquier comprador destinar los terrenos a una actividad que no sea industrial?
-No. Las condiciones de la venta de los bienes de Vulcano son las contempladas en el plan de liquidación aprobado por el Juzgado. En el mismo, no se establece ninguna condición ni cláusula que condicione el destino de los mismos. Esta administración concursal siempre apostó por el mantenimiento de la actividad industrial, con la consiguiente generación de un gran número de puestos de trabajo, y de ahí que hubiésemos dado preferencia sobre cualquier otra opción, a la venta de la unidad productiva y valorado positivamente la recolocación de extrabajadores de Vulcano.
-Si no prospera la venta en primera fase, ¿hay más interesados además de Vicalsa?
-A día de hoy la única oferta recibida es la que se ha mencionado al principio, la de la empresa Marina Meridional, del grupo Argos. Somos conocedores del presunto interés que Vicalsa ha manifestado por la compra de Factorías Vulcano, pero a día de hoy no hemos recibido oferta alguna alternativa a la primera, ni de Vicalsa ni de ninguna otra empresa.
