El fabricante de componentes para automóviles Faurecia contabilizó unas pérdidas netas de 433 millones de euros en el primer semestre, frente a las ganancias de 346 millones de euros del mismo período del año anterior. La pandemia del coronavirus tuvo un "fuerte impacto" sobre el conjunto de la industria automovilística mundial y del resto de sectores económicos, motivando el cierre de los centros productivos y la paralización industrial. El consejero delegado, Patrick Koller, afirmó que, en medio de esta crisis "sin precedentes", Faurecia está demostrando "agilidad y resistencia", centrándose en la salud la plantilla, la liquidez y mejorar su posición de negocio.