La segunda mayor central de biomasa de España está ya conectada a la red, vendiendo la producción al mercado. Greenalia acaba de anunciar que la planta de Curtis, donde invirtió 135 millones de euros, adelanta su encendido un mes, con mejores previsiones de negocio, además. La mejora de la retribución que acaba de aprobar el Ministerio para la Transición Ecológica a este tipo de instalaciones supone un extra en la facturación de 5 millones, que elevará la cifra de negocio total en la central a más de 37 millones de euros cuando esté en pleno funcionamiento el próximo 2021.

La planta suma una potencia de 50 megavatios y acumulará unos 1.050 millones de euros de ingresos recurrentes durante los 25 años de vida útil. En la construcción trabajaron unas 1.000 personas, entre empleos directos e indirectos, de los que 100 seguirán como fijos.

"Con esta apertura, Greenalia se consolida como una empresa importante en el proceso de descarbonización de España, además demuestra el rigor y seriedad de nuestra empresa para cumplir con el plan de negocio establecido para 2023, adelantándonos incluso a los objetivos marcados", resalta Manuel García, CEO de la compañía, en la nota de prensa con el anuncio.