Endesa ganó 171 millones el año pasado, el 88% menos que los 1.417 millones que ganó en 2018, debido al impacto en sus cuentas del deterioro contable por valor de 1.409 millones de euros del cierre programado de la central de As Pontes y el resto de sus térmicas y por la menor remuneración a la generación extrapeninsular por otros 404 millones. Las ganancias netas ordinarias, de hecho, mejoraron el 3%, hasta los 1.562 millones, impulsadas por la buena gestión del mercado liberalizado, tanto de gas como de electricidad, la estabilidad del mercado regulado y la contención de costes.

Estos mismos factores permitieron elevar en un 6% el resultado bruto de explotación (ebitda), hasta los 3.841 millones, según el consejero delegado de Endesa, José Bogas, que aseguró que, pese a los resultados, mantienen su previsión de dividendo (1,475 euros por acción, el 3 % más).

Por negocios, el ebitda del mercado liberalizado repuntó el 22% (1.475 millones) apoyado en la aportación de la filial de renovables, entre otros factores; en tanto que el del regulado bajó el 2% (2.362 millones) por el descenso en los territorios no peninsulares. Los ingresos bajaron ligeramente (0,2%) y sumaron 20.158 millones.

En este contexto de descarbonización, Endesa incrementó sustancialmente sus inversiones en 2019 en energías renovables (211%), y se ha convertido en la primera empresa en incorporar al sistema toda la potencia que se le adjudicó en las subastas organizadas por el Gobierno en 2017 (879 MW). Con los tres parques incorporados en Galicia durante el pasado ejercicio, la compañía, a través de su filial Enel Green Power, alcanza un total de 566 MW en 23 complejos de aerogeneadores.

Alrededor de un 70% de las inversiones de desarrollo del grupo el ejercicio pasado han ido a parar a proyectos de generación renovable, lo que ha permitido que el 73% de la generación peninsular y el 59% conjunto de la generación total de Endesa en 2019 ya esté libre de emisiones de CO2. El consejero delegado de Endesa, José Bogas, señaló que el grupo "va a liderar la transición energética en España", para lo que está haciendo "un enorme esfuerzo inversor en energías renovables y en digitalización, clave para continuar ofreciendo buenos resultados en un mercado cada vez más complejo". La cartera de nuevos proyectos renovables que asciende a unos 20.000 MW, de los cuales 5.700 MW ya tienen adjudicados puntos de conexión.