La Comisión Europea ha elevado una décima su previsión del crecimiento de la economía española tanto para este año, hasta el 1,6%, como para 2021, cuando crecerá un 1,5%, situando así su pronóstico en línea con la última actualización del Gobierno, presentada este mismo martes.

Bruselas ha presentado este jueves las 'previsiones económicas de invierno', que sólo recogen proyecciones sobre el comportamiento del PIB y no sobre déficit o deuda. El informe subraya que la ralentización de la economía española en el segundo semestre de 2019 fue "más leve" de lo anticipado debido a "una pequeña recuperación del consumo privado".

En consecuencia, el Ejecutivo comunitario asegura que la economía española cerró el año pasado con una expansión del 2% del PIB, una décima más de lo que había calculado en noviembre de ese año.

"La composición del crecimiento en la segunda mitad de 2019 también apunta a una demanda doméstica más sólida y, por tanto, a una perspectiva más positiva que lo anticipado. El crecimiento se espera ahora que se estabilice en una tasa trimestral del 0,4%" durante los próximos dos años, dice el informe para explicar la revisión al alza del crecimiento para 2020 y 2021.

El aumento de la renta disponible y un incremento "más moderado" del ahorro de los hogares sostendrán el consumo privado, remarca el documento del Ejecutivo comunitario, La inversión, por su parte, se recuperará durante los próximos meses tras un "débil" final de 2019.

A su vez, la Comisión Europea anticipa que la contribución del sector exterior disminuirá a lo largo de este año y será "en general neutral" en 2021, a medida que el crecimiento de las exportaciones se ralentice y las importaciones se "aceleren".

Con respecto a la inflación, los servicios económicos del Ejecutivo comunitario estiman que cerró en 2019 en un 0,8%, una décima menos de lo esperado hace unos meses, y crecerá hasta el 1,2% este año y el 1,3% en 2021, gracias a un incremento "gradual" de la inflación subyacente que compensará el comportamiento del precio del petróleo.

Sin cambios en la Eurozona

La Comisión Europea (CE) mantuvo este jueves su previsión de crecimiento económico en la eurozona en el 1,2% del producto interior bruto (PIB) durante 2020 y 2021, mientras que para el conjunto de la Unión Europea (UE) permaneció en el 1,4% para esos dos años.

"La perspectiva para la economía de Europa es de un crecimiento estable, pero discreto, durante los próximos dos años", declaró en un comunicado el comisario europeo de Economía, Paolo Gentiloni, quien aseguró que con esas estimaciones la eurozona "prolongará el periodo más largo de expansión desde el lanzamiento del euro en 1999".

Las previsiones macroeconómicas de invierno de la CE publicadas hoy subrayan que la epidemia del coronavirus es "un nuevo riesgo a la baja" con sus implicaciones para la salud pública, la actividad económica y el comercio, "en especial, en China".

Bruselas asume que el pico del brote se producirá en el primer trimestre de 2020 y que las repercusiones serán "relativamente limitadas" en todo el mundo.

En cualquier caso, el comisario europeo de Economía, Paolo Gentiloni, recalcó en un comunicado que es "demasiado pronto para evaluar el alcance del impacto económico negativo" generado por el coronavirus.

El Ejecutivo comunitario, sin embargo, admite que la firma de una tregua preliminar en la guerra comercial entre China y Estados Unidos, la conocida como "primera fase" del acuerdo entre Washington y Pekín, "ha ayudado a reducir los riesgos a la baja hasta cierto punto".

No obstante, destaca que "el alto grado de incertidumbre en torno a la política comercial de Estados Unidos sigue siendo una barrera para una recuperación más generalizada del sentimiento empresarial".

La CE también cita como riesgos la agitación social en Latinoamérica, las tensiones geopolíticas en Oriente Medio, las dudas sobre la futura relación entre la Unión Europea y el Reino Unido tras el Brexit e incluso el cambio climático, aunque en este caso, en el largo plazo.

De todas formas, añade que la creación de empleo, el aumento de los salarios, el consumo privado o la inversión ayudarán a mantener el crecimiento económico en Europa, si bien el Ejecutivo comunitario constata que serán "insuficientes" para que el PIB aumente a una mayor velocidad.

Entre las principales economías de la eurozona, España liderará el crecimiento los dos próximos años (1,6% en 2020 y 1,5 % en 2021), seguida de Holanda (1,3 % en ambos ejercicios), Francia (1,1% en 2020 y 1,2% en 2021), Alemania (1,1 % y 1,1 %) e Italia (0,3 % y 0,6 %).

En cuanto a la inflación, Bruselas elevó la previsión una décima en la eurozona para 2020 y 2021, hasta el 1,3% y el 1,4%, en tanto que en la Unión Europea permaneció en el 1,5% este año y cayó una décima, hasta el 1,6%, para el siguiente.