Es un mercado al alza, que necesita oferta y elementos disruptivos para llamar la atención de los clientes ante tantos folletos en las agencias de viajes: restaurantes tres estrellas Michelin, montañas rusas, rutas inéditas y hasta salones de tatuaje a bordo. Un nuevo modo de ocio, para los que se lo pueden permitir y para los que podrían pagarlo todo. El año próximo se entregarán 19 grandes cruceros en todo el mundo, de los que más de la mitad explotarán el concepto mini, con buques de menos de mil pasajeros. Dos de ellos son de compañías novatas en el transporte marítimo: Ritz-Carlton Yacht Collection (no necesita presentación en Galicia) y Virgin Voyages (del controvertido Richard Branson). Dos, también, llevarán el sello de Vigo: Evrima (Hijos de J. Barreras) y EvrimaSea Cloud Spirit. La crisis del astillero de Beiramar ha reducido esta nómina en dos unidades tras la cancelación -y posterior ejecución de garantías- de los cruceros de Havila Kystruten.
El primero en surcar los mares será el de Metalships, que se estrenará el 29 de agosto con una ruta de trece noches entre Lisboa y el puerto italiano de Civitavecchia. No será barato: los precios oscilan entre los 8.565 y 15.475 euros por persona. Es un contrato de 51 millones de euros suscrito entre la factoría de Grupo Rodman y la naviera alemana Sea Cloud Cruises (a través de una sociedad vehículo o SPV), y que ha reutilizado el casco de un proyecto, el del Sea Cloud Hussar, que nunca llegó a término por la caída en desgracia de Factoría Naval de Marín. Será el tercer buque para la armadora, y el segundo crucero a vela más grande del mundo. "Nunca perdimos la visión del proyecto. Cuando el casco quedó liberado después de los trámites concursales, inmediatamente vimos la oportunidad. Mereció la pena esperar", valoró el director general de Sea Cloud, Daniel Schäfer.
El caso del Evrima es muy distinto, y para las revistas especializadas es el buque por el que se espera con "más impaciencia". Asignado a Barreras por Cruise Yacht Upper Holdco Limited (explota la marca comercial Ritz-Carlton Yacht), tenía previsto su viaje inaugural para el 5 de febrero. La compañía lo pospuso para el 14 de junio debido a los retrasos en la construcción y a la profunda crisis del astillero, en preconcurso e inmerso en una inusual disolución suspendida. Si prosperan los planes del responsable de la naviera, Douglas Prothero, se estrenará en noviembre del año próximo. Pese al evidente impasse del proceso, Marriott International -propietaria de Ritz- aseguró esta semana que todavía pretende surcar los mares "en junio de 2020". Lo hizo en la presentación de sus objetivos para el año próximo, durante el que abrirán una veintena de hoteles de ultralujo por todo el mundo.
De momento los focos, en este segmento premium, los ha absorbido el Secret Lady. Contratado en la atarazana italiana Fincantieri, es el primero de los buques de la división armadora de Virgin, Virgin Voyages. Acaba de realizar con éxito las pruebas de mar, entre Génova y Marsella, con el patrón de la empresa, Richard Branson, a bordo. Arrancará oficialmente el 1 de abril. Le seguirá el Valiant Lady, adjudicado a Cantiere Navale Fincantieri Sestri Ponente.
