El baile ha sido caótico; los más de mil empleos destruidos en las empresas auxiliares y las incertidumbres (o inconcreciones) que rondan todavía a la compañía no van a dejar que termine en vals. Pero acaba, al fin, con una solución que priorizará la vuelta a la actividad del mayor astillero privado de España. Hijos de J. Barreras va a poder, tras más de cien años de trayectoria, varios concursos, una nacionalización y posterior privatización, "recomenzar su futuro". Así lo cree el consejero delegado de Cruise Yacht Upper Holdco Limited, Douglas Prothero, que ayer firmó un "principio de acuerdo" con Petróleos Mexicanos (Pemex) y Albacora. Faltan muchos detalles en la comunicación que dirigió a FARO, pero sí hay una garantía: Barreras no quebrará el 2 de febrero, y retomará los trabajos a bordo del crucero Evrima de inmediato. Las tres partes "han alcanzado un principio de acuerdo que resuelve la actual situación de Hijos de J. Barreras y permite que recomience el futuro del astillero", dice textualmente. Prothero ha remitido esta información con Cruise Yacht Upper como sujeto, sin mención expresa al fondo Oaktree.
A falta de aclarar los términos del acuerdo, el directivo canadiense ha ofrecido las mismas condiciones al expresidente del astillero, José García Costas. "Quienes hasta este momento hayan decidido no participar en esta solución aún tienen la puerta abierta para hacerlo en el futuro". Prothero ofreció a Albacora hace semanas un millón de euros por su paquete accionarial (24,5%), y remitió la misma propuesta al directivo vigués (suma otro 24,5%). No solo no tuvo éxito, sino que García Costas planteó su propia iniciativa para comprar todo Barreras, sin financiación bancaria. La pasada semana aseguró que todavía contaba con el respaldo de Ignacio Lachaga (Albacora), mensaje que el comunicado de la armadora dinamitó ayer. "Nuestra familia ha estado ligada durante mucho tiempo al astillero de Hijos de J. Barreras. Creemos que este acuerdo con Cruise Yacht Upper es un paso importante en este momento crítico y que estamos apoyando el único camino viable para los trabajadores y las industrias marítimas de la región", zanjó la heredera del empresario pesquero, Luisa Lachaga.
¿En qué consiste el acuerdo? La naviera, domiciliada en Malta, no ha aclarado si se trata de una compraventa inmediata o es una continuación de la cesión de derechos políticos, aunque del contenido del comunicado se desprende una solución más profunda toda vez que incluye una "reestructuración global" del astillero. De inicio, Prothero traerà a Beiramar un equipo gestor "externo y experimentado" para garantizar la entrega de su crucero lo antes posible -pretende estrenarlo el 28 de noviembre de 2020-; en segunda instancia, nombrará previsiblemente otro consejo de administración. A los "nuevos administradores les será encomendado asegurar la finalización de Evrima, así como de otros proyectos viables de Hijos de J. Barreras", expuso el comunicado de la compañía, remitido casi a medianoche. "También se sentarán las bases para que Hijos de J. Barreras pueda conseguir negocios nuevos y rentables en el futuro". Cruise Yacht Upper atiende así a varias exigencias de la administración, que ponía -y pone- tres requisitos para apoyar sus planes: equipo de gestión, cartera de pedidos y atención a las auxiliares. Entre esos "proyectos viables", tras la cancelación de los cruceros de Havila y la próxima rescisión del contrato de Armas, solo está amarrado el barco inaugural para Ritz-Carlton Yacht Collection. Prothero no ha garantizado más unidades para Barreras de momento; firmó un segundo pedido en mayo, pero no entró en vigor y decaerá.
"Estamos muy agradecidos a nuestros compañeros de PMI [filial de Pemex] y Albacora, quienes han abrazado nuestra propuesta dirigida a garantizar una solución para todos aquellos afectados por el reciente impasse de Hijos de J. Barreras", resumió Douglas Prothero, que quiso agradecer "trabajadores, proveedores y subcontratistas, entidades financieras, Cesce, al Ministerio de Industria y a la Xunta de Galicia por toda la paciencia y el apoyo mostrados hasta la fecha mientras todos trabajábamos en hallar una solución". El comunicado incluye también una valoración del presidente interino de Barreras, el mexicano Víctor Navarro, a modo de despedida de una aventura, la de la industria naval gallega, muy criticada en el país azteca.
"A Pemex le complace haber alcanzado este acuerdo [...], que supone un esencial punto de inflexión que contribuirá a que Pemex pueda centrarse en el núcleo duro de su negocio"
