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Endesa "acelerará" el cierre de la térmica As Pontes antes de 2022

La multinacional presenta la Transición Energética como "una oportunidad" y prevé incrementar un 32% sus centrales renovables

Central térmica de Endesa en As Pontes. // Fran Martínez

Solo era cuestión de tiempo que aquella "discontinuidad de la producción" anunciada por Endesa el 27 de septiembre para sus centrales térmicas de la Península se convirtiera oficialmente en un cierre definitivo. Y con fecha: 2022. Para entonces, la compañía manejará solo 200 megavatios (MW) en instalaciones de carbón en los sistemas insulares por cuestiones de seguridad de suministro hasta 2030, según refleja la actualización del Plan Estratégico presentado ayer. Actualmente maneja 5.100 MW, con As Pontes como joya de la corona (1.469 MW). Para las plantas de Compostilla (León) y Andorra (Teruel) ya solicitó las correspondientes autorizaciones de cierre al Gobierno central y eso es lo que también hará con la de Galicia y Litoral (Almería) en su estrategia de "cese acelerado", según especifica la propia multinacional en los documentos remitidos a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).

La descarbonización es "el foco" del "rediseño de nuestro modelo de negocio", apunta el grupo energético dirigido por José Bogas, que presenta la Transición Energética como un territorio de "oportunidades" con una inversión posible de 236.000 millones de euros. En su caso, el objetivo es pasar de los 7.400 MW en tecnologías verdes con los que cerrará el actual 2019 a 10.200 en 2022, lo que supone un incremento del 32%, apoyado en la solar y la eólica, con las que este mismo año sumará 300 y 600 nuevo megavatios en operación.

La revolución del mix de generación en Endesa requiere una inversión neta de 7.700 millones de euros de aquí al final del plan estratégico, donde se apuesta, además, por el desarrollo de redes inteligentes y la infraestructura de apoyo al coche eléctrico. Son 1.300 millones de gasto por encima de lo previsto. Endesa ha decidido compensarlo con un ajuste del dividendo a sus accionistas -la italiana Enel es la primera, con el 70% del capital-, que será de un mínimo de 1,4 euros brutos por acción este año y 1,6 euros el próximo 2020, para luego en 2021 bajar a 1,4 euros y 1,3 en 2022. La nueva hoja de ruta estima un incremento anual del beneficio en todo el periodo del 8%, hasta llegar a 1.900 millones dentro de dos ejercicios.

En su último informe financiero, el de las cuentas del tercer trimestre, Endesa deja claro que el paso de clausurar As Pontes viene de la disparada cotización de los derechos de emisión de CO2 y "el estrechamiento del hueco térmico" provocado también por la caída de la demanda eléctrica en España. Ni una palabra de la supuesta presión del Gobierno central, que, de hecho, contaba con As Pontes durante algunos años más. La multinacional insiste en que la producción con carbón no es rentable ni con la supresión del "céntimo verde".

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