Hay un timón compartido en Hijos de J. Barreras, con tantos capitanes que no atina el rumbo. Y no se abren las esclusas entre las distintas partes que han de aclarar el futuro del mayor astillero privado de España: la propiedad mantiene sus encuentros periódicos, sin avances aparentes, y los armadores programan los suyos con la administración y la banca, como si el cisma accionarial fuese cuestión menor a resolver.
Sí está claro que Barreras pretende diseñar una hoja de ruta con el objetivo principal de retomar la actividad, pero también que en esa planificación no ha tenido en cuenta a la totalidad de los demás actores. De ahí la intención de poner la quilla del segundo crucero para Ritz-Carlton antes de final de año, como avanzó FARO, y que estén contactando con las auxiliares para determinar qué falta por hacer y cuánto va a costar rematar el buque. Ayer empleados de las empresas Team Electric y ASA subieron a bordo para hacer un presupuesto. La segunda realizó "mediciones" sobre la pintura de cubierta. "[Douglas] Prothero quiere empezar ya", apuntaron otras fuentes, en referencia al consejero delegado de la naviera. Aún con la empresa en preconcurso y sin despejar cuál será su futuro, y aunque él no tenga participación en Barreras ni sea miembro de su consejo.
El problema es el mismo, como coinciden todas las fuentes consultadas. "Nadie se va a arriesgar a volver si no hay dinero sobre la mesa". A día de hoy es "inviable" que se retome la actividad en varadero. Y a Ritz-Carlton le quedan siete meses escasos antes de estrenar su primer barco, el Evrima, que lleva un mes con la construcción parada tras la estampida de las subcontratas. En el sector consideran que esta estrategia de Barreras para reactivar las tareas a bordo es la misma que la emprendida con el segundo barco de Ritz, "que no se rompa el contrato, tener encendido el vínculo con la armadora y generar una presión en positivo". Si antes del 31 de diciembre no se realiza la puesta de quilla del segundo crucero de ultralujo, el contrato -que no entró en vigor, no hubo primer pago- es rescindible unilateralmente. La diferencia es que en el caso del Evrima coinciden los objetivos de astillero y armadora: "Prothero no puede permitirse esperar más". Ese buque es de Barreras, y el proyecto de construcción también.
El máximo directivo de la naviera volvió a reunirse ayer con la Xunta (a través de Xesgalicia) y Pymar, en un encuentro al que asistieron -en Madrid- los americanos JP Salazar y Andreas Krämer. Sin avances significados. El Ejecutivo autonómico mantiene su predisposición a ayudar a resolver el conflicto, así como a "mediar y tender puentes" para lograr financiación para "todos los barcos y todos los armadores". No tienen constancia en la Xunta de que se haya procedido a la rescisión de ninguno de los cinco contratos que tiene Barreras en cartera: dos de Ritz, dos de Havila Kystruten (parados desde julio) y un ferri para Armas (firmado hace un año, no se puso la quilla). En el anterior encuentro entre las partes quedó evidente que el astillero tenía tres semanas antes de pedir concurso; ha pasado una ya.
Rumanía
Rumanía
Pero los movimientos de las armadoras van más allá de los encuentros formales con la administración o la patronal. El propio Prothero negocia la construcción de dos de sus cruceros ultrapremium lejos de Vigo, sin barajar por tanto que Barreras logre retener la segunda unidad (a la que quería poner la quilla antes de terminar el año), ni firme la tercera a la que aspiraba bajo la presidencia de José García Costas. Esos contactos toman forma en la región rumana de Mangalia, donde Grupo Damen cuenta con una enorme infraestructura de construcción naval, otrora propiedad del gigante Daewoo Heavy Industries. "Se está trabajando con planos", destacan fuentes de toda solvencia. FARO contactó con Ritz-Carlton y Damen para que ofrecieran su versión sobre estas negociaciones, sin obtener respuesta.
Coincide este paso con la visión de la banca, distinta a la de los demás actores: "Si bien a Ritz le interesó el astillero, ahora solo quiere su barco". El primero, el Evrima. Y Havila, como también publicó este periódico la pasada semana, ha avivado las conversaciones con la atarazana turca de Tersan para ejecutar sus planes lejos de Galicia y tras haber sondeado a astilleros de Vigo.
En ese maremagnum de capitanes se mantiene la plataforma de auxiliares que, empujadas por el bloqueo, han decidido dar un paso al frente. Prevén constituir la sociedad limitada con la que sellar un acuerdo con Petróleos Mexicanos (Pemex, dueño del 51%) este viernes, bien en forma de memorando -cesión de derechos políticos- o a través de un contrato de compraventa. Aunque no sea la suya la única opción que puede asomar para un traspaso de la propiedad.
