El pasado junio, y a través de una carta a los presidentes de las organizaciones provinciales, el extesorero de la Confederación de Empresarios de Galicia (CEG) aseguraba que su "actuación" se limitaría a la firma de nóminas y seguros sociales de los trabajadores por su disconformidad con la gestión económica de la patronal. A fecha de hoy la CEG no cuenta con el informe de auditoría de 2018 o el presupuesto de 2019. Y esta es la razón que subyace bajo la decisión de Roberto Almuiña de presentar su dimisión, que ayer publicó FARO en exclusiva. No obstante, y en un comunicado de prensa, la patronal gallega replicó que el también secretario de la Asociación Galega de Áridos (Arigal) justificó su decisión "tras el último proceso electoral fallido".

"Muchos conocíamos su decisión y sus motivos", agregaron ayer fuentes consultadas de la CEG. "Se les fue el presidente de la Comisión de Economía y ahora el tesorero, pero siguen sin aportar información", agregaron. En la misma nota, la CEG asegura que "agradeció [a Almuiña] los servicios prestados en el cargo". El empresario llevaba como tesorero de la confederación desde febrero de 2017.