Hijos de J. Barreras y Havila Kystruten sellaron ayer el acuerdo que reactivará "en días" la construcción de los cruceros Pollux y PolluxPolaris "Está cerrado", indicaron fuentes próximas al astillero vigués, que todavía tiene que trasladar los pormenores -y sobre todo el dinero- a las empresas auxiliares. "Se había producido algún impago ya y esto es importante para la tesorería" de la compañía. Los buques serán sometidos a un alargamiento para corregir los defectos del diseño, a cargo de la oficina técnica Havyard Design & Solutions (del mismo grupo que la armadora). El proyecto se paralizó formalmente el 5 de julio por los problemas del esquema de financiación de los buques, primero, y de su sobrepeso, después. A esa fecha cada unidad, proyectada con 31.418 CGT, superaba en 1.200 toneladas el peso estimado. El sobrecoste del rediseño se ha repartido de forma salomónica entre Barreras, Havila y Havyard. Distintas fuentes de las auxiliares confiaron también ayer en el inicio "inminente" de las obras. FARO trató de contrastar esta información con el astillero y la naviera, sin éxito.
Los cruceros forman parte de un pedido de cuatro, de los que dos fueron asignados al astillero turco Tersan Shipyard. Eso sí, estas últimas unidades, bautizadas como Capella y Castor, ya no son propiedad de Havila Kystruten. La naviera ha firmado un contrato con la State Transport Leasing Company (GTLK), rusa y de capital público, que comprende la venta y posterior arrendamiento de los barcos. El acuerdo, que incluye una opción de recompra pasados diez años, se materializó a través de la filial GTLK Global Business, con sede en Irlanda. Éste se ejecutó, según medios especializados, por 171 millones de euros, con lo que la compañía noruega ha podido hacer caja y estará en condiciones de afrontar el sobrecoste de los cruceros. Fuentes de Havila indicaron que se trata de operaciones "habituales" de financiación, y reconocieron que existe premura en conocer la fecha final de entrega de los buques Pollux y Polaris (construcciones 1710 y 1711 de Hijos de J. Barreras). Si los buques no surcan los fiordos desde el 1 de enero de 2021 -el reparto de rutas se formalizó a través de un concurso público- Havila Kystruten encara penalizaciones del Gobierno de Noruega.
