Factorías Vulcano da los últimos coletazos de vida, al menos como una empresa de construcción naval y no como una sociedad en proceso de liquidación. Casi la totalidad de la plantilla, a excepción de varios empleados que quedarán en las instalaciones mientras no se cierran por completo, serán sometidos a un ERE de extinción, como anticipó FARO en su edición del 25 de julio. El liquidador presentó en el juzgado el expediente un día después, el 26.

El actual gestor de la factoría, Emilio Rodríguez de Dios, planteó un Expediente de Regulación Temporal de Empleo (ERTE), que no fue aceptado por la plantilla. "Era una puesta en escena porque a continuación teníamos que firmar uno de extinción". De este modo, y "como mucho en septiembre" se ejecutará el despido colectivo. Ahora Rodríguez de Dios -cuenta con Diego Comendador como auxiliar delegado- deberá remitir el expediente a la autoridad laboral competente y al juez, Sergio Burguillo. Los trabajadores dan por hecho que será aceptado y que estarán "en la calle" en un mes.