El presidente del Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB), admitió ayer que el proceso de liquidación del Banco Popular, que se hizo "en medio de una gran presión y con poquísimo tiempo", algo que es "fácil decir pero no es fácil de hacer". Pese a tomarse decisiones "de un día para otro", Jaime Ponce, defiende que funcionó la cooperación con las instituciones europeas.