El Gobierno de EE UU acaba de prohibir a las empresas del país la venta de tecnología a cuatro compañías y un centro de investigación con sede en China, alegando motivos de seguridad nacional y repitiendo así los pasos que ya dio con Huawei a mediados de mayo. La orden emitida por el Departamento de Comercio que dirige Wilbur Ross sostiene que "actúan de forma contraria a la seguridad nacional o a los intereses en materia de política exterior de EE UU". Son Sugon, el principal fabricante chino de superordenadores y tres de sus subsidiarias de fabricación de chips: Higon, Chengdu Haiguang Integrated Circuit y Chengdu Haiguang Microelectronics Technology.También queda vetado el Instituto de Tecnología Computacional Wuxi Jiangnan.