El Gobierno de Portugal aprobó en 2015 una estrategia para combatir la " desertificación" del llamado "interior", equivalente a lo que se ha dado en llamar la "España vacía". Se creó un mapa de 164 municipios -sobre todo en el norte del país, con 52 concellos, y el Alentejo-, que tendrían "privilegios" para acceder a fondos estructurales europeos hasta el año 2020. En cuanto a iniciativas privadas, se determinó una bonificación lineal del 10% "frente a los valores practicados en otras áreas del país". En Portugal siembre han existido fuertes diferencias territoriales -el sociólogo Adérito Sedas Nunes ya habló de un "país dual" en los 70-, contra las que ha querido poner freno Lisboa en los últimos años.