La segunda huelga en una semana en la línea de montaje de PSA Vigo alcanzó "un seguimiento mayor" que la del pasado jueves 16, según indicaron los sindicatos convocantes. CC OO, CIG y UGT celebraron "el éxito alcanzado" en los paros de cuatro horas por turno, cuyo seguimiento volvieron a cifrar "entre un 80 y un 90%". Desde la dirección de la empresa, por su parte, rebajaron la cifra a un 18% (inferior al 19% que informaron el pasado jueves) e indicaron que la huelga generó "alteraciones que no permitieron fabricar todo el volumen de vehículos previsto" para la jornada. Durante el turno de mañana llegó la convocatoria oficial para la mesa de diálogo en la que ambas partes tratarán la sobrecarga de trabajo en montaje y desde las centrales sindicales se mostraron rotundos: "Vamos a darles una oportunidad, pero no descartamos más movilizaciones si no vemos soluciones".

Los paros, que doblaron en tiempo a los convocados la semana pasada, estuvieron acompañados de dos movilizaciones, una a las 11.00 horas y otra a las 19.00 horas. "No tengo palabras. Estamos sorprendidos del seguimiento, que es una muestra más de que la gente dijo basta", explicó Santiago García. El responsable de CC OO en la planta informó por la mañana que "las líneas estaban completamente paradas" y que fue en ese momento cuando llegó la convocatoria para la reunión de mañana. "Vamos a dar una oportunidad al diálogo y todo dependerá de lo que nos digan", comentó García.

Desde la CIG, Manuel Domínguez indicó que "el volumen de participación es similar al jueves" de la semana pasada y que "ahora toca hablar de lo que se va a hacer". "Con estas huelgas queríamos demostrar que va siendo hora de arreglar los problemas de montaje", recordó Domínguez. A su juicio, desde los sindicatos fueron "cautelosos" y "dando pasos progresivos". "Nos parece triste que tengamos que llegar a este extremo por culpa de una dirección que no es capaz de hacer su trabajo", sentenció.

Ana Valiño, de UGT, añadió durante la tarde que "el seguimiento fue masivo" y que "en lugar de descender se incrementó más". "Ahora esperamos que de una vez por todas pongan medidas encima de la mesa que puedan ser percibidas por los trabajadores en sus puestos", comentó Valiño. Los tres sindicatos, a los que se sumó la CUT en las movilizaciones, organizaron también las manifestaciones. Durante la mañana contaron incluso con la visita del secretario general de Podemos, Pablo Iglesias, después de que interviniera en un mitin en Vigo.

Mientras, desde la dirección de la empresa informaron que las líneas sí tuvieron actividad, "pero con alteraciones" que impidieron completar el volumen de producción previsto, sobre el que no quisieron dar cifras. Lo que sí adelantaron es que reafirman la "disposición al diálogo constructivo", para lo que recuerdan la convocatoria para mañana. Eso sí, también lamentaron "que los sindicatos escojan la vía del conflicto, con el daño que hace para la imagen de la empresa".