Un grupo de delegados sindicales de la CIG recorrieron ayer la ciudad de Vigo para concentrarse delante de siete oficinas de Abanca y protestar así "por la excesiva carga de trabajo y la política comercial", en concreto, "contra los objetivos de colocación de productos financieros que la clientela no demanda". El sindicato instó también a la entidad a una igualdad efectiva en las condiciones entre hombres y mujeres.