Portugal siempre es una buena opción para pasar unas vacaciones como las de Semana Santa, aunque este año no se presume como un destino idílico si el viaje se hace en coche. La huelga , que ha decretado ya una "emergencia energética" por la escasez de combustible estaciones de todo el territorio nacional. Decenas de conductores gallegos se han visto atrapados ya en colas kilométricas; en casi 800 estaciones del norte del país (distritos de Porto, Vila Nova de Cerveira, Bragança y Vila Real) es una misión imposible.

El Gobierno de António Costa había decretado unos servicios mínimos del 40% a los transportistas, que arrancaron la huelga en la madrugada del lunes, aunque confederaciones empresariales y asociaciones de usuarios aseguran que no se están cumpliendo. Aunque fuese cierto, los afectados aseguran que ese 40% solo sirve para abastecer servicios básicos como ambulancias o coches de bomberos. Cerca de una veintena de aviones, con salida prevista en el aeropuerto de Faro (sur del país), han tenido que volar hasta el aeropuerto de Sevilla para llenar sus tanques.

Las filas de más de media hora para repostar vehículos se han repetido desde primera hora en el país, y a alrededor del mediodía más de 2.700 del total de 3.068 estaciones disponibles presentaban falta de gasóleo, gasolina o ambos. El combustible más afectado ha sido el gasóleo, del que no se tiene ninguna reserva en 1.500 estaciones de servicio de todo el país.