Aunque la proporción de la población española que vive de alquiler es "todavía reducida", según el Banco de España, en una comparativa internacional, su peso no para de aumentar. El organismo pone como ejemplo la subida del 14,2% al 16,9% de los hogares que optan por el arrendamiento, según los últimos datos del Instituto Nacional de Estadística (INE). "Aunque la tendencia hacia un mayor peso del alquiler es generalizada, el grupo de edad en el que ha avanzado en mayor medida es el de los jóvenes de 16 a 29 años, seguido del grupo de edad de entre 30 y 44 años", sostiene en un informe sobre la evolución del mercado de la vivienda en España publicado ayer.
El supervisor apunta a "factores sociológicos ligados a cambios en las preferencias" como una de las razones del incremento, pero también "al impacto que la crisis económica ha tenido en estos segmentos de población". Habla incluso de "impacto especial" en el caso de los jóvenes, por la merma salarial y la menor reducción del desempleo.
Tras la "intensa corrección" de los años de crisis, el Banco de España sostiene que el ladrillo vive un periodo de "dinamismo". También en el caso de los precios del alquiler, hasta el punto de haber superado ya los niveles precrisis en Madrid y Barcelona.
