Los representantes de los trabajadores de Unitono en Ourense llevan días moviéndose para aglutinar la mayor cantidad posible de apoyos desde las administraciones en defensa de sus puestos. De las entrevistas con alcaldes y grupos parlamentarios lograron arrancar ya el compromiso de varias declaraciones institucionales y el traslado de su problema a la Xunta, como reclamó el BNG. Los 130 empleos del grupo de telemarketing, el 90% ocupados por mujeres, están en el aire por la posible deslocalización de los servicios que se prestan a Naturgy a Colombia y al nuevo call center que Unitono acaba de abrir en la localidad catalana de Reus. El caso se suma a los golpes recientes en el sector en la comunidad por el cierre anunciado del servicio de atención telefónica de Santa Lucía y el Expediente de Regulación de Empleo Temporal (ERTE) en Bosch Vigo, con un centenar y 540 trabajadores, respectivamente, afectados.

"La situación de la empresa es crítica y está en juego nuestra supervivencia", aseguran los representantes de UGT en la sede de Unitono en Ourense. "Están en riesgo numerosos puestos de trabajo", advierte CCOO, en nombre del comité de empresa, que ha convocado dos paros de protesta entre las 12.00 y las 13.00 horas y de 18.00 a 19.00 por la tarde, para reclamar información a la compañía. La Federación de Servicios de CCOO asegura que Unitono achaca a la energética "la decisión de llevar fuera de la comunidad el servicio" y trasladarlo a la plataforma abierta en marzo en Reus.

Unitono llegó a tener en Ourense más de 250 empleados y ahora son 131. El comité recuerda que en 2013 ya pasaron por un ERTE y que fue "el sobreesfuerzo" de la plantilla lo que permitió seguir adelante con la actividad, sin que se hayan recuperado hasta ahora parte de los recortes asumidos entonces.

El ERTE de Bosch en Vigo para 540 empleados tras prescindir de otros 200 efectivos que estaban contratados por Empresas de Trabajo Temporal (ETT) por la pérdida de carga laboral de Vodafone llega a los tribunales. No hubo acuerdo en el acto de conciliación celebrado esta semana. "La empresa no aportó ninguna documentación para justificar las medidas ni tiene voluntad de negociar", afirma Laura Pérez Figueroa, presidenta del comité de empresa. El reciente encuentro con la secretaria xeral de Emprego, Covadonga Toca, fue "un chasco", dicen. La Xunta asegura que no encuentran defectos de forma en el expediente. "Estamos viendo como cogen gente nueva para servicios comerciales y nos dicen que los del departamento de soporte de Vodafone no estamos cualificados, cuando otras veces que les interesó sí hicieron cambios", asegura Pérez Figueroa.

De los 53 centros de atención telefónica que cierra Accepta, del grupo Santa Lucía, tres están en Galicia (Pontevedra, Ourense y A Coruña), con alrededor de 100 empleados. La empresa se ampara en que está abierta a traslados a los cinco call centers que sí mantendra en Madrid, Sevilla, Valencia, Oviedo y Hospitalet, pero el personal de Galicia duda que existen vacantes para tantos y recuerdan que su sueldo no compensa el cambio.