Al libro del Apocalipsis, el Evangelio según San Mateo, al de San Juan y al Político de Platón. A estas cuatro lecturas recurrió ayer el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, para ilustrar su opinión sobre la actual situación política y económica ante el comité asesor de la Confederación de Empresarios de Pontevedra (CEP). Para su conferencia Oportunidades y riesgos: El nuevo contexto económico, de las dos primeras recogió las alusiones a los "falsos profetas", con actitudes que atribuyó -sin mencionarlos directamente- al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez; al exministro de Economía, Pedro Solbes; o al regidor vigués, Abel Caballero. "La verdad sigue haciéndonos libres". Porque, para Feijóo, decisiones como la de no respaldar la prórroga de la concesión de Ence en Lourizán (Pontevedra) responden a la prevalencia de las "mentiras sociológicas" o los "intereses partidistas a corto plazo". Porque, añadió, "no todo vale. A mí tampoco me gusta la actual ubicación, pero lo que importa es que siempre esté por encima el interés general". Y, con el revés a la pastera, Madrid ha decidido ejecutar una "decisión irresponsable, sin ofrecer alternativas". Lo que no haría el político ideal, según lo describió Platón.

Las referencias canónicas y filosóficas sirvieron así al máximo mandatario gallego para advertir de un riesgo de colapso del tejido forestal gallego, del que Ence es su máximo exponente. "Han decidido no defender la prórroga sin proponer alternativas", en un dictamen asumido con "enorme ligereza". A su juicio, un eventual cierre de la factoría de Lourizán convertirá al de Marín en un "puerto fantasma". También le dieron pie a censurar toda la política industrial de Sánchez, al que afeó que haya dado por "solucionado" el futuro de Alcoa en A Coruña, que "defienda" el cierre de la regasificadora de Reganosa (Mugardos) o que haya puesto "pegas" a la apuesta de la Xunta por los aviones no tripulados (drones). "¿Alguien cree que eso es una política industrial?" "Las malas políticas -prosiguió- pueden poner en peligro un robusto tejido empresarial". No le faltaron los ejemplos que ilustran, para Feijóo, esta tesis.

Ejemplos

Ante un auditorio colmatado de asistentes, el líder de la Xunta recordó la "obstinada negación de la crisis" del Ejecutivo de José Luis Rodríguez Zapatero como un exponente de las "consecuencias" que tienen las políticas basadas en mentiras. Colocó al mismo nivel el "desafío independentista" -con el " Espanya ens roba, España nos roba"- y el divorcio -todavía sin desenlace claro- de Reino Unido de la Unión Europea. Se detuvo más con el "ejemplo" de Vigo. Sin citar expresamente a Caballero, Feijóo lo acusó de "utilizar permanentemente la confrontación con intereses personalistas" por las diferencias sobre el transporte metropolitano, el centro de formación profesional, la ampliación de Balaídos o el campo de fútbol. Comportamientos que, cree, se vuelven "en contra de Vigo y de su prestigio" a causa de "personas que funden su personalidad con un cargo, del que es inquilino temporal". "Las burbujas políticas, los falsos profetas y las mentiras sociológicas son -para zanjar esta alocución- antídotos contra el bienestar".

También sobre el futuro de Ence, en este caso durante su visita a Pontevedresa Group con motivo de su 60 aniversario, Feijóo no descartó la intervención de la Xunta y exigió una rectificación. "La empresa que se defienda ella, nosotros defenderemos a los gallegos que viven del sector forestal en Galicia. No podemos compartir que una decisión así se pueda ventilar en una campaña electoral, con la desidia de un Gobierno que no considera importante ni el contacto con una comunidad autónoma ni respetar a los trabajadores, a las familias y a la actividad económica de Galicia".