La nueva ley de crédito inmobiliario entrará en vigor a los tres meses de su publicación en el Boletín Oficial del Estado, y no a los 30 días de su publicación, al avalar el Congreso este jueves la enmienda del Senado que daba más margen a las entidades financieras para adaptarse a la legislación. Este cambio, que se votó ayer en el Pleno del Congreso junto al resto de enmiendas introducidas por el Senado en la ley, fue respaldado por PP, Ciudadanos, PDeCAT, UPN y Foro Asturias, mientras que PSOE, Unidos Podemos, Esquerra Republicana, Compromís, EH-Bildu y Coalición Canaria se opusieron, sin éxito, a la enmienda.

La nueva ley de crédito inmobiliario no entrará en vigor al menos hasta finales de mayo, una vez que el plazo máximo para trasponer esta directiva europea expirara hace ya tres años, en marzo de 2016.

El Congreso sí rechazó la propuesta del PP para condicionar la entrada en vigor de las nuevas condiciones de transparencia material -entre ellas el nuevo reparto de gastos- a un desarrollo reglamentario y revertió también otros cambios introducidos por los populares en la Cámara Alta, como dejar en cero el tipo impositivo del IAJD, el conocido como impuesto hipotecario, y la regulación de un crédito verde para fomentar las inversiones de eficiencia energética y la utilización de energía renovable en edificios.

El Congreso recuperó ayer las comisiones por amortización anticipada en las hipotecas a tipo fijo, que el PP había duplicado en el Senado. La nueva ley fija un límite máximo a estas comisiones del 2% en los diez primeros años de vigencia del crédito y de un 1,5% a partir de entonces.