El presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, reivindicó ayer ante directivos de empresas un "gran cambio tranquilo" en la economía gallega en la última década, que ha atribuido a la "estabilidad" política de su gobierno. En la clausura del quinto encuentro de directivos líderes de Galicia 100 Consellos para o 2019, puso en valor que la comunidad cerró 2018 con un superávit de 125 millones, y destacó que es algo que no ocurría desde 2002. En este sentido, defendió la búsqueda del "equilibrio" político y económico como "fundamento de la estabilidad", lo que contrapuso con una situación como la de Cataluña -aunque sin citarla- en la que "proyectos alocados" con "malas" políticas provocan un "clima tóxico que lastran el desarrollo".