Xunta, Banco Santander, Pymar y Factorías Vulcano. Son los cuatro actores que participan, desde las 10 horas, en la enésima reunión vital para el futuro del astillero. Aunque existe un acuerdo entre la entidad financiera y la naviera, Armas -como avanzó FARO en exclusiva-, no se ha concretado de qué manera se va a materializar y, por tanto, cómo van a retomarse los trabajos a bordo del ferri Villa de Teror. Santander deberá, o así lo entiende el Gobierno gallego, verificar que Vulcano tendrá la capacidad financiera y técnica para rematar el contrato.

A día de hoy el Villa de Teror está en periodo de cancelación (desde el 24 de enero), por lo que la naviera no podrá reclamar un euro de los 10.000 diarios que, según el contrato, debería recibir en caso de retrasosVilla de Teror. El barco tendría que haber sido entregado el pasado 28 de junio. Entretanto, la industria auxiliar lleva sin cobrar desde el mes de mayo (no ha cobrado el hito número 8), y los trabajadores de Vulcano tampoco ingresan una nómina desde septiembre.

En las subcontratas temen que Vulcano entre en liquidación antes de terminar el ferri, que éste se venda "a un precio de derribo" y vuelvan a sufrir una quita más. De la treintena de empresas que componen la plataforma de auxiliares afectadas por Vulcano "dependen" 800 trabajadores; 350 de ellos han participado de algún modo en la construcción del ferri.