Los trabajadores de Alcoa se concentraron ayer contra de la importación de aluminio procedente de países extranjeros en los puertos de Vigo y Vilagarcía de Arousa, donde un centenar de personas partició en las protestas. "Es una preocupación muy grande que a nosotros se nos trate de cerrar la producción de aluminio primario y vemos en la prensa la entrada de aluminio externo de otros países que están produciendo en una competencia completamente desleal con nosotros", lamentó el presidente del comité de empresa de Alcoa, Juan Carlos López Corbacho.

En la concentración, que comenzó a las 10.30 horas en el Puerto de Vigo, los empleados de la multinacional del aluminio reivindicaron de nuevo el mantenimiento de la actividad en la planta de A Coruña y una solución para los problemas de la tarifa en la industria electrointensiva y después fueron recibidos por el presidente de la Autoridad Portuaria, Enrique López Veiga, que les explicó que aluminio que entra por el puerto procede principalmente de países como Arabia Saudí o Mozambique. En las instalaciones viguesas se descargan 150.000 toneladas de aluminio al año, de las que el 95% es para consumo interno.

López Corbacho asegura que cada año entran a España un total de casi 300.000 toneladas de aluminio, "la mayoría por Vigo, Vilagarcía y otros puertos como Marín". "Solo en Vigo se recibe prácticamente la misma cantidad que se produce en la fábrica de Avilés en un año", apuntó. "Existe una demanda real de aluminio primario -añadió el delegado de la CIG en Aloca, Julio Moskowich, a Europa Press-. No entendemos por qué se cierran las fábricas si es necesario este material".

Parte de los manifestantes se trasladaron a Vilagarcía, donde volvieron a concentrarse para reclamar "más regulación" a la UE.