Con un volumen medio de ventas de 30 millones de euros, el sector transformador de productos pesqueros repite en Galicia el patrón minifundista del mapa empresarial autonómico. En su mayoría son empresas pequeñas que, pese a erigir a la comunidad como la de mayor densidad industrial de la Eurozona (en cuanto a la pesca), apenas han puesto un pie en el ranking de 100 mayores compañías del mundo. El mismo en el que están Nueva Pescanova o Frinsa, y en el que acaban de entrar las viguesas Iberconsa y Grupo Profand. La tendencia ha cambiado y el sector ha empezado a ganar más y más tamaño; la crisis precipitó una depuración en el número de firmas, se ha acelerado el proceso de desapalancamiento y la demanda de productos del mar no ha parado de crecer (a un mínimo anual del 3%). Y, por supuesto, porque la materia prima escasea; reforzarse en origen ofrece control sobre los aprovisionamientos, los precios y trazabilidad. Solo en dos años (2015-2017) el top de pesqueras de Vigo ha sumado activos por más de 300 millones de euros, de acuerdo a la información depositada en el Registro Mercantil.
Este cómputo no incluye, eso sí, las últimas operaciones corporativas de Iberconsa (Argentina), Profand (Argentina, Estados Unidos) o Atunlo (Portugal). El de la primera ha sido el caso más paradigmático, y el único -de momento- con un fondo de inversión como coprotagonista. Iberconsa cerró 2015 con una flota de 22 buques, y cuenta ahora -a falta de computar los de la argentina Valastro- con 42, y ha sumado asimismo dos plantas de elaborados y una frigorífica. Solo en inmovilizado material la dimensión del grupo ha medrado casi un 40% durante ese bienio. El resultado es conocido: es la mayor referencia mundial en langostino patagónico y merluza congelada a bordo, con 106.000 toneladas comercializadas y ventas (en 2017) por 325 millones. En el Black Friday chino ( Guang Gun Jie) el gambón que se vendió a través de Win Chain (Alibaba) fue el suyo, y de la marca Nós.
Otros modelos
Tampoco han entrado en las ratios de 2017 las últimas operaciones de Profand en Marruecos (Sofinas), Argentina y Estados Unidos (tras la alianza con Newsan Food) y España (la toma del 33% de Frioya), con las que este grupo familiar ha reforzado sus volúmenes de materia prima y ha ahondado en la diversificación de mercados. Es la misma estrategia emprendida por Pescapuerta, que prosigue bajo la gestión de la familia fundadora. La compañía ha optado por un crecimiento orgánico -las ventas de Elmar han aumentado un 60% desde 2014-, y ha incorporado un fresquero para operar en el Atlántico suroccidental, avanza en el proyecto de construcción de un arrastrero congelador de 75 metros y "sondear" oportunidades para crecer en Marruecos, Senegal o Mauritania. "Nosotros vamos en camino de 230 millones de volumen de negocio sin haber comprado facturación, con nuestro propio modelo", resumió a FARO su presidente, José Puerta, en la última edición de Conxemar.
De hecho esta táctica de crecimiento orgánico ha sido la más común en el sector (Pereira selló la compra de la conservera Portomar en 2016, en una operación que anticipó este periódico). La viguesa Atunlo (alianza empresarial de Comercial Pernas con Pevasa e Inpesca) abrió en 2015 una factoría en Cabo Verde, pero rehabilitó después la antigua nave de Freiremar (con Frigalsa) y acaba de inaugurar una planta de lomos de atún en Vila Nova de Cerveira (en una joint venture con Marfrío). Su inmovilizado material ha pegado otro salto (de 2015 a 2017) del 40%, casi el mismo porcentaje en que ha medrado el de Mascato. Esta última ha sido la única armadora de Vigo en aportar nuevas unidades de pesca al caladero de Gran Sol, con inversiones adicionales para ganar capacidad en Chile (filial Cultivos Azules), Namibia o Salvaterra.
Fandicosta ha replicado la mejora de instalaciones tras el siniestro que calcinó parcialmente la factoría de Moaña. Congelados Noribérica, Videmar, Comercial Pernas o Pereira (que acaba de estrenar el Argos Cíes, el mayor buque pesquero construido por una armadora viguesa en los últimos 30 años) han ganado músculo también de forma sustancial. Ejemplo de esta tendencia es, por último, la docena de barcos proyectados -uno de ellos por Rampesca, ya en vigor- por el sector, en la que será la primera gran renovación de flota desde finales de los años ochenta.
