La falta de mano de obra cualificada en el metal, sobre todo por la recuperación del naval y de la automoción, no es un mal exclusivo de Galicia. Sucede exactamente lo mismo y por las mismas razones -los efectivos perdidos durante la larga crisis- al otro lado del Miño. Por eso los empresarios del sector de Galicia y Portugal, agrupados en la Federación Luso Galaica de Industriales Metalúrgicos (Feluga), trabajarán coordinadamente para afrontar su "principal reto" para los próximos años. Cifran sus necesidades en unos 28.000 empleos, de los que algo más de 25.000 serían en territorio luso.

Durante la asamblea ayer en Vigo acordaron lanzar estrategias conjuntas para,profundizar en la formación profesional de los trabajadores y, por otro, "hacer atractivo" el sector para los demandantes de empleo.