La cadena de tiendas de congelado Hiperxel, subsidiaria de Grupo Iberconsa, celebró ayer en Vigo su treinta aniversario en la tienda de Sanjurjo Badía, la que fue su primera apertura en 1988. Con 74 puntos de venta en toda Galicia, el objetivo de la empresa es seguir creciendo "aunque cada vez cuesta un poco más", expuso a FARO su gerente, Raúl Vilariño. "Cuando ya tienes tantas como nosotros encontrar buenas ubicaciones va siendo más complicado. Logísticamente Galicia es el territorio que debemos abarcar". El regidor vigués, Abel Caballero, acompañó a directivos y personal de la compañía en la celebración.
Creada por dos socios del grupo pesquero, David Ramos y José Rodríguez Táboas, fue en 2001 cuando se integró en la multinacional que hoy comanda Alberto Freire. El pasado ejercicio Hiperxel alcanzó una facturación de 19.520.000 euros, con en torno a 200 puestos de trabajo directos que se incrementan durante las campañas de Navidad y verano. Con la matriz inmersa en un proceso de venta -por la decisión del fondo Portobello de desinvertir-, Vilariño ha despejado incertidumbres en cuanto a Hiperxel, al que anticipa un futuro "exactamente igual que como el de Iberconsa. Simplemente puede haber un cambio accionarial, pero Hiperxel continúa con su proyecto, tratando de hacer historia en la ciudad e historia de país. ¿Qué puede cambiar? El que tiene las acciones, pero a veces eso es lo menos importante; lo relevante es el proyecto".
