El acuerdo alcanzado la semana pasada por la Comisión del Pacto de Toledo que establece que las pensiones subirán "en base al IPC real" no es suficiente para los jubilados españoles, que ayer volvieron a protagonizar una nueva jornada de movilizaciones en las principales ciudades de España -en el caso de Galicia en Santiago- coincidiendo con el Día Internacional de las Personas Mayores. A la actualización de las pagas con la inflación, los pensionistas suman otras reivindicaciones como que el sistema público esté garantizado por los Presupuestos Generales del Estado y en la Constitución, restablecer la jubilación a los 65 años o que la pensión mínima sea de 1.084 euros, como establece la Carta Social Europea. Sobre este último punto habló ayer la ministra de Trabajo, Migraciones y Seguridad Social, Magdalena Valerio, que señaló que no se puede comprometer a aprobar una pensión mínima de 1.080 euros, igual que tampoco puede hacerlo para fijar el Salario Mínimo Interprofesional (SMI) en 1.200 euros. "Ya me gustaría a mí, y a todo el Gobierno, poner una pensión mínima de 1.080 euros. Lo que no voy a hacer es prometer algo que sé que no voy a poder cumplir", sentenció la responsable de la política laboral del Gobierno de Pedro Sánchez. Sí se comprometió, por contra, a mantener el poder adquisitivo de las pagas y la suficiencia del sistema público de pensiones.

La ministra hizo estas declaraciones tras una reunión en Bilbao con una representación del Movimiento de Pensionistas de Bizkaia, que le pidió explicaciones sobre el acuerdo alcanzado por los partidos en el seno del Pacto de Toledo. Valerio defendió que el Gobierno no puede prometer una subida que no va a poder cumplir y subrayó que el Ejecutivo está "ocupado" en conseguir, a través del Pacto de Toledo y del Diálogo Social, un sistema público "sostenible social y financieramente".

La paga mínima de 1.084 euros que reclaman los pensionistas españoles -en Galicia está entre las reivindicaciones del Movemento Galego en Defensa das Pensións Públicas (Modepen)- implicaría para el Gobierno un gran desembolso pues son muchos los beneficiarios de prestaciones públicas que cobran la pensión mínima. De hecho, de las 9.646.404 pagas que abonó la Seguridad Social el mes pasado, casi siete millones (6.855.939, el 71%) están por debajo de los 1.100 euros. El desembolso en septiembre ascendió en todo el Estado a más de 3.235 millones de euros en todo tipo de prestaciones (de jubilación, incapacidad permanente, viudedad, orfandad y en favor de familiares) de los que 618 millones correspondieron a Galicia

La reunión de la ministra con los pensionistas vascos coincidió con numerosas movilizaciones en toda España. En Madrid, convocados por CCOO y UGT, varios centenares de jubilados recorrieron las calles del centro para entregar un documento en el Congreso de los Diputados en el que piden que se materialice el principio de acuerdo alcanzado la semana pasada en el Pacto de Toledo.