Un total de siete alcaldes y alacaldesas de la comarcas de Louriña, Baixo Miño y Condado-Paradanta se reunieron ayer en Porriño para abogar por la vuelta a la actividad productiva de Maderas Iglesias, cuyos trabajadores llevan 20 días de huelga indefinida.

Los regidores de Mos, Porriño, Salceda de Caselas, Salvaterra de Miño, Ponteareas, Mondariz y As Neves emitieron un comunicado en el que hacen un llamamiento "a retomar la actividad laboral previa reactivación del proceso negociador entre las partes en conflicto".

El alcalde accidental de Porriño, Manuel Carrera, y el concejal de Industria, Marcelino Coto, fueron los anfitriones ayer de esta reunión para analizar la grave situación que atraviesa la empresa maderera y pedir la vuelta a la actividad.

Así aseguran que son "conscientes de la irreparable consecuencia laboral y socioeconómica que supondría la eventual desaparición de " Maderas Iglesias SA", y teniendo la profunda convicción de que existe una salida que conjugue los intereses del personal junto con los de la parte empresarial, instan a la parte empresarial y social a general a suficiente sinergía y confianza mutua como requisito imprescindible para volver a la actividad productiva y proponen que sea materializada a través del Consello Gallego de Relaciones Laborales y la Secretaría de Empleo de la Xunta de Galicia como instrumentos útiles para esa finalidad".

"Desde las alcaldías queremos garantizar el Empleo y la actividad económica en nuestras comarcas y haremos todos los esfuerzos necesarios para conseguirlo poniéndonos a disposición de las partes para conseguirlo", señalaron los máximos representantes de estos ayuntamientos.

Los 200 trabajadores de la firma maderera llevan ya veinte días de huelga indefinida y no se visualizan soluciones próximas tras la votación el pasado viernes de seguir con el paro.

Ya hace una semana tumbaron el preacuerdo entre el comité y la dirección de la empresa, y en la nueva asamblea para decidir si la huelga continúa o no, la opción de continuar con la huelga se impuso en la consulta tras ser aprobada con 115 votos a favor (62,5%), frente a los 69 (37,5%) que se decantaron por suspenderla. De esta forma, Maderas Iglesias comenzó su tercera semana consecutiva de huelga -arrancó el pasado 28 de agosto- pese al preacuerdo alcanzado a comienzos de semana entre empresa y sindicatos. En el documento firmado en el Consello Galego de Relacións Laborais (CGRL), que actuó de mediador, se acordaba poner fin a la huelga en Maderas Iglesias. A cambio, la empresa se comprometía a no realizar ningún tipo de despido hasta noviembre de 2019 y ofrecía abonar la nómina de agosto en diez días y la extra de verano, antes de noviembre.