El precio de la luz sigue escalando sin control. Tras las incesantes subidas de las últimas semanas, el coste mayorista de un megavatio hora (MWh), lo que pagan las empresas distribuidoras y repercuten al recibo de los consumidores, ha marcado hoy a un nuevo máximo anual, al llegar a los 74,58 euros/MWh.

Durante los últimos días, a comienzos del mes de septiembre, el precio del mercado de generación eléctrica ha vuelto a registrar continuas subidas alcanzando niveles récord, superando el máximo del año en dos días consecutivos.

El martes día 4, el "pool" alcanzó los 71,31 euros MWh, y para el día de hoy, miércoles día 5, el precio de la electricidad alcanzó los 74,58 euros MWh. Además para las horas nocturnas, se llegará a alcanzar un precio de 79,33 €/MWh, el precio más caro de todo 2018.

Con esta nueva subida, el precio de la electricidad se sitúa en una media de 18,02 céntimos por kilovatio/hora (kWh), que resulta de aplicar a los 14,1647 euros del precio de la energía el 27,19% de impuestos indirectos.

Facua ha pedido al Gobierno que actúe con urgencia para frenar esta escalada y ha denunciado que el precio medio de la energía consumida hoy para los usuarios con la tarifa semirregulada (PVPC) es un 23,8% más caro que el del mismo día de 2017, cuando el kWh se situó en 14,55 céntimos (11,4422 más impuestos).

Por ello, la asociación ha solicitado una reunión con la ministra de Transición Energética y Medio Ambiente, Teresa Ribera, para exponerle sus reivindicaciones ante las "desproporcionadas" tarifas eléctricas.

Entre ellas, Facua reclama que el Gobierno amplíe la definición de "consumidor vulnerable", al que la normativa comunitaria permite proteger con tarifas bonificadas.

La asociación considera que el actual modelo de bono social resulta "incoherente e injusto", ya que por un lado acota sobremanera el número de beneficiarios estableciendo niveles de renta excesivamente bajos, y por otro permite que cualquier familia numerosa, por muy elevados que sean sus ingresos, pueda beneficiarse de él.

Asimismo, apunta al modelo de subasta en el que se establecen las tarifas en el mercado mayorista como principal responsable de la "injustificada" carestía del recibo de la luz, ya que, en su opinión, se trata de un sistema "opaco" que favorece la especulación: una subasta basada en un precio marginal que viene determinado por la última oferta en ser aceptada, es decir, la más elevada.

Además, la asociación denuncia que el modelo tarifario implantado durante el Gobierno de Mariano Rajoy no sólo ha facilitado a las compañías nuevas subidas "injustificadas", sino también un "auténtico caos" para los usuarios, ya que ahora no pueden conocer con antelación qué tarifas se les aplicarán y sus recibos pueden llegar a incluir hasta 744 precios distintos por la energía consumida -uno por cada hora incluida en el periodo de facturación-. "Algo que hace muy difícil verificar si se producen errores o fraudes en la facturación", constata.

Facua viene denunciando que las tarifas eléctricas vulneran la legislación en materia de protección de los consumidores, ya que, en su opinión, la aplicación de una tarifa distinta cada hora es contraria a la obligación que tienen las empresas de facilitar a los usuarios información sobre sus precios con la antelación necesaria.

También la Federación Nacional de Empresarios de Instalaciones de España (Fenie) ha pedido al Gobierno que ofrezca soluciones. En este sentido, Fenie confía en que con motivo de la comparecencia de la ministra para la Transición Ecológica, Teresa Ribera, en el Congreso de los Diputados, el Ejecutivo aporte medidas que beneficien al usuario final.

Además, la federación considera que el sistema de abastecimiento eléctrico de España debe estar al servicio del consumidor, al tratarse de un bien de primera necesidad.

Asimismo, ha mostrado su apoyo al autoconsumo, que, según Fenie, es parte indispensable de la solución y confía en que las premisas del Gobierno sobre su regulación sean materializadas lo antes posible.